Nueva York, EE.UU.- El entusiasmo de inmigrantes indocumentados de Nueva Jersey porque pueden solicitar una licencia de manejar se ha tropezado con obstáculos que a juicio de los afectados y activistas se debe a que el departamento de Vehículos de Motor (DMV) no está preparado para este momento.
El pasado 1 de mayo entró en vigor la ley que permite a indocumentados obtener un permiso de conducir y muchos acudieron a las oficinas de DMV para solicitar el carné pero tuvieron que regresar a sus casas decepcionados al ser rechazados.
La causa que recibieron fue que supuestamente no era válido su Número de Identificación Personal del Contribuyente (ITIN) que emite el Servicio de Rentas Internas (IRS) y tienen cientos de miles de indocumentados para pagar sus impuestos.
«El sábado fue un desastre», aseguró a Efe una inmigrante peruana que prefirió no revelar su nombre y que se sintió «decepcionada» cuando rechazaron su documento del IRS pese a que fue renovado recientemente.
«Traté de explicarle que el ITIN estaba bien, le di el papel de que lo renové en diciembre, le mostré el documento de que llené los impuestos con ese número y no quiso escuchar», dijo y recordó que la empleada le pidió que llamara al IRS para que le cambiaran el número, tras lo cual le regresó los documentos.
De acuerdo con la inmigrante, su decepción fue tanta que pensó que solicitar el carné era una «mentira del Gobierno para sólo ilusionarnos y, así como yo que me fui desilusionada, mucha gente pasó por lo mismo».
«Estás tan ilusionada esperando que llegue este día durante tanto tiempo para que pasen estos inconvenientes. Es una decepción terrible», afirmó la mujer, quien aseguró que los empleados no estaban preparados con respecto a esta nueva ley.
En 2019, tras casi dos décadas de lucha, se convirtió en ley el proyecto que extendió las licencias de conducir a indocumentados en este estado, que podría beneficiar a casi 750.000 residentes, incluidos más de 400.000 indocumentados.
El 1 de mayo se abrió el proceso para los inmigrantes con el ITIN y a partir del 1 de junio el turno será para los que no cuenten con ese número, y, según activistas estos componen el mayor grupo, por lo que esperan una avalancha de solicitudes ese mes.
«Mucha gente entraba y salía» el sábado de la oficina de Vehículos de Motor en Freehold, en el condado de Monmouth, sin poder iniciar el proceso porque sus documentos eran rechazados y sin una explicación, dijo además a Efe esta madre peruana, que finalmente pudo entregar este lunes su solicitud.
Jaime, quien hace 15 años paga sus impuestos con su número de ITIN, aseguró que le faltaron el respeto cuando una de las empleadas le gritaba sin cesar que es un inmigrante «ilegal» y que no podía obtener una licencia.
Recordó que la empleada que le atendió: «Fue muy malcriada y me empezó a gritar que le mostrara mi Seguro Social. Le dije que había ido a solicitar mi licencia y que tenía mi número de ITIN y me dijo que eso no servía».
Agregó que pese a que compañeros de trabajo le informaron que el problema con los ITIN se había arreglado «todavía seguía gritándome que era ilegal» y también le cuestionó su nombre en otro documento.
Finalmente, agregó, todo se resolvió luego de que otros empleados volvieron a intervenir a su favor.
El activista Carlos Castañeda, del grupo Cosecha, dijo a Efe haber recibido muchas quejas sobre lo sucedido y se propuso trabajar con otras organizaciones proinmigrantes para formar un grupo de vigilantes del proceso en DMV.
Castañeda, así como la también activista Itzel Hernández, del grupo American Friends Service Committee, que también ha recibido quejas por lo sucedido, aseguraron a Efe que la agencia gubernamental no está preparada para atender a esta población con un proceso de documentación diferente.