El polémico proyecto presentado por la alcaldesa de Guayaquil busca, según la funcionaria publica, hacer frente a las altas tasas de criminalidad que se viven en el país sudamericano.
Permitir el porte y tenencia de armas por parte de la población civil para enfrentar los elevados índices de delincuencia es uno de los puntos de la iniciativa legislativa que la alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri, le entregó al presidente Guillermo Lasso.
La iniciativa, presentada durante un acto público con motivo de los 201 años de independencia de Guayaquil, el 9 de octubre, ha sido denominada ‘Proyecto de Ley por la Vida y la Seguridad Ciudadana’ y son reformas a legislaciones existentes, entre ellas el Código Orgánico Integral Penal (COIP), la Ley sobre Armas, Municiones y Explosivos; así como a la Ley de Movilidad Humana vigente en Ecuador.
“Demando que las leyes que cobijan a la delincuencia cambien. Que quienes pasen los rigurosos exámenes a través del Ministerio de Defensa, puedan portar armas como lo hacían antes”, apuntó Viteri, luego de darse a conocer la propuesta. La alcaldesa justificó que las armas en manos de los ciudadanos tienen un “efecto disuasivo” y agregó que, si bien es cierto que su propuesta no terminará con la delincuencia, si será “un grano de arena” para combatirla.
Pese a la convicción de Viteri, la iniciativa ha generado opiniones divididas.
Diego Pérez, profesor universitario e investigador en seguridad y defensa, explicó la Voz de América que otras experiencias similares en el mundo no han logrado la reducción de los índices de criminalidad.
Pérez alertó que la iniciativa podría terminar convirtiéndose en un mecanismo de resolución de otros conflictos por esa vía. “Es decir, tú me debes dinero, tú me chocaste el auto, siento que quedaste viendo mal a mi hijo, a quien fuera, y por lo tanto va un balazo», argumentó. «Hay un problema social ahí”.
Mientras que para el psicólogo clínico y profesor universitario Ernesto Flores la sociedad ecuatoriana se ha vuelto violenta en los últimos años y esa violencia genera el riesgo de que las personas la reproduzcan, lo que podría tornarse incontrolable.
“El uso de las armas en sociedades donde, incluso, los sistemas democráticos son más estables, como Estados Unidos, es un gravísimo problema, que se discute cada vez que hay un tiroteo”, explicó Flores.
Recientemente la ministra de Gobierno de Ecuador, Alexandra Vela, presentó ante el Congreso un balance del comportamiento de la violencia en el país. Según su informe, desde enero hasta la primera semana de octubre se reportaron 1.742 homicidios, 813 más que los reportados en el mismo periodo de 2020.
Para ser aprobada, la propuesta debería pasar primero por su debate y aprobación en el Legislativo, con el que el gobierno de Guillermo Lasso tiene una posición divergente.