Washington, EE.UU.- La presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi, dijo a sus correligionarios en una reunión a puerta cerrada que su objetivo es someter a voto esta misma noche el plan social del presidente estadounidense, Joe Biden, y mañana viernes hacer lo mismo con el proyecto de infraestructuras.
Una asesor demócrata de alto rango de la Cámara Baja explicó a Efe que esa es la intención de Pelosi, aunque la situación podría cambiar.
La líder demócrata no confirmó esa noticia en su rueda de prensa semanal, esquivó todas las preguntas al respecto y se limitó a decir: «Vamos a aprobar las dos leyes, pero para hacerlo, tenemos que tener votos necesarios para las dos y ahí es donde estamos».
Pelosi está presionando a las alas progresista y centrista de su partido para aprobar la agenda de Biden cuanto antes, especialmente tras la derrota que sufrieron los demócratas en las elecciones del martes, en las que cosecharon unos resultados peores de lo esperado y perdieron la Gobernación de Virginia.
Los demócratas tienen una mayoría muy estrecha en la Cámara Baja, por lo que no pueden permitirse rebeliones internas ni de progresistas ni de centristas.
El proyecto que podría someterse a votación esta noche contiene las grandes propuestas sociales de Biden con aumentos de gasto en sanidad, cuidado de menores y cambio climático, entre otros asuntos.
Al principio, los demócratas también incluyeron una propuesta de baja familiar y de maternidad pagada a nivel nacional, pero tuvieron que retirarla por presiones del ala centrista del partido, especialmente por parte del senador demócrata de Virginia Occidental, Joe Manchin.
Pelosi, sin embargo, decidió ayer miércoles volver a incluir en el paquete la propuesta, de vital importancia para el sector más progresista.
El paquete de gasto social tendrá un costo de unos 1,75 billones, lo que supone una rebaja sustancial respecto a los 3,5 billones iniciales.
Una vez que la Cámara Baja lo apruebe, tendrá que pasar al Senado, donde los demócratas no pueden permitirse perder ni un voto.
Al respecto, el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, expresó este jueves su deseo de que ese plan sea aprobado por la Cámara Alta antes de Acción de Gracias, que en EE.UU. se celebra el 25 de noviembre.
La otra iniciativa que Pelosi quiere someter a voto es la de infraestructura, valorada en 1,2 billones de dólares y que fue aprobada en agosto en el Senado con el apoyo de los dos partidos.
Esa ley aún no ha salido adelante en la Cámara Baja porque el sector progresista del partido ha insistido en que las dos iniciativas deben aprobarse al mismo tiempo, ya que temen que una vez aprobada la ley sobre infraestructuras los miembros centristas del partido dejen a un lado el plan social de Biden.