San Juan, Puerto Rico.- Cientos de miembros de varios sindicatos en Puerto Rico marcharon este domingo hacia La Fortaleza, sede del Ejecutivo, reclamando en el Día Internacional del Trabajador, por el derecho a la salud, la educación y las pensiones dignas.
Algunos de los grupos que participaron en la marcha fueron la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (Utier), la Federación Central de Trabajadores, la Unión General de Trabajadores, la Federación de Maestros y la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios.
La marcha, que incluyó consignas de los sindicalistas, arrancó desde la Plaza Colón y recorrió algunas de las principales calles del Viejo San Juan, incluyendo la Calle Norzagaray hasta llegar a La Fortaleza.
Por su parte, la Central Puertorriqueña de Trabajadores, presentó al gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, y a los presidentes legislativos, una serie de reclamos relativos para el bienestar de los servidores públicos, empleados de la empresa privada y ciudadanos en general.
Entre esos reclamos, estipularon aprobar un proyecto de reforma laboral que viabilice la derogación de las medidas legislativas que han trastocado los derechos y beneficios laborales.
Por ello, exigieron «una verdadera reforma laboral que se traduzca en justicia social y económica para los trabajadores».
Igualmente, exhortaron la aprobación de proyectos que protejan las pensiones presentes y futuras y garanticen, un verdadero retiro digno que dé estabilidad a los servicios esenciales que ofrecen al pueblo las agencias, las corporaciones públicas, la Universidad de Puerto Rico y la Autoridad de Energía Eléctrica.
Los reclamos de los unionados fueron, en parte también, por las condiciones que impone el Plan de Ajuste de la Deuda que entró en vigor hace mes y medio.
La semana pasada, el presidente de la Asociación de Maestros de Puerto Rico (AMPR), Víctor Bonilla, pidió reunirse con Pierluisi para identificar fuentes de pago para mantener la pensión en el 75 % del salario que recibiría el docente.
Según explicó Bonilla en un comunicado de prensa, la cita con Pierluisi fue para discutir tres alternativas que presentó el organismo ante el gobierno y la Junta de Supervisión Fiscal ante la congelación de las pensiones y la efectividad del Plan de Ajuste de la Deuda.
«Estas opciones tienen el propósito de atender los dos reclamos mayoritarios de los educadores que son la preocupación por la edad de retiro a los 63 años y mantener la pensión en el 75% del salario que recibiría el docente», explicó Bonilla.
Mientras tanto, miembros de la Asociación de Maestros (AMPR) se congregaron en el Puente Dos Hermanos, a la entrada del Viejo San Juan, para reclamar al Gobierno que tome una decisión sobre asuntos que se quedaron pendientes en torno al retiro de los maestros.
El grupo dijo que continúan luchando para mejorar las condiciones de trabajo mediante varias estrategias y se encuentran negociando el nuevo convenio colectivo.
Sybaris Morales, secretaria general interina de la AMPR, indicó que la propuesta del magisterio es que se aumente de 50 % a 75 % la aportación definida al plan de retiro para todos los maestros, incluyendo aquellos que tienen 55 años hasta que cumplan 63 años, que es la nueva edad para retirarse.