Mientras siguen los señalamientos y protestas por el comportamiento agresivo de las fuerzas del orden, en especial durante las manifestaciones masivas que muestran el descontento de ciertos sectores del pueblo dominicano, su Luis Abinader, declaró el pasado martes, que el Gobierno ya instaló el sistema CompStat para monitorear los hechos delictivos a nivel nacional y en sectores populares.
La presa local dominicana, recuerda que el sistema CompStat fue usado por la policía de Nueva York durante el mandato del exalcalde Rudolph Giuliani, y luego se extendió en la Unión Americana. Durante la campaña política del 2016 del presidente Abinader, Giuliani, elaboró un diagnóstico sobre la situación de inseguridad en la República Dominicana, así como el estado de la Policía Nacional. En julio de 2019, Giuliani retornó para dar seguimiento al plan, bajo la premisa que, de aplicarlo, “la delincuencia empezaría por ser controlada en un 50 %”.
Durante una entrevista con el presentador Sergio Carlo en su canal de YouTube, el jefe de Estado indicó que hará el anuncio al país en los próximos días. Una vez instalado en República Dominicana, las autoridades tendrán estadísticas confiables, “Eso nos ayudará a dar un diagnóstico”.
Al ser cuestionado por el presentador sobre los hechos que involucran a agentes policiales, Abinader manifestó que no puede cambiar a los agentes formados hace 10 años, pues apenas tienen meses con nuevos entrenamientos. Reconoció que en las actuales estadísticas hay un incremento en los robos; sin embargo, en la actualidad, los asesinatos por cada 100 mil habitantes han bajado, situándose en 11, cuando en 2008 eran 19.
Dijo que el primer intento de reforma de la Policía Nacional ha coincidido con una pandemia, provocándose un aumento de la criminalidad en todo el mundo.
“Es normal de después de una crisis o una pandemia, aumente la criminalidad”, afirmó Abinader.
En una nota del Diario Libre del 15 de septiembre del 2020, enumeran en qué consistía la propuesta de Giuliani, para atacar la delincuencia; entre ellos están, la reestructuración del Departamento de Policía; el incremento salarial sustancial, bonos y pago de horas extra a la fuerza policial; la transparencia en la documentación de informes policiales, flujo de denuncias, análisis de los datos de criminalidad, correcta clasificación de muertes por homicidio, incluyendo el destino de bienes incautados a las organizaciones criminales; la aplicación del programa mejorado de prueba de drogas e integridad a los oficiales; el análisis del exceso de distritos policiales para determinar si son necesarios, así como de la abultada estructura de supervisión producto del nepotismo; el equipamiento de las patrullas y motocicletas de los agentes de policía sobre todo en las zonas de alta criminalidad; y las mejoras a la aplicación de la legislación anticorrupción, así como al presupuesto asignado a diferentes unidades contra la violencia.
