Garnet Valley, PA – Mayo es el mes de la Salud Mental. Todos hemos sido tocados por enfermedades mentales de una forma u otra. Ahora enfrentando la crisis de COVID-19 aún más personas están sufriendo, sintiéndose aisladas y por lo tanto más vulnerables a decaer en su salud mental.
Según la Sociedad de Ansiedad y Depresión de América (ADAA, por sus siglas en inglés) 40 millones de adultos mayores de 18 años (18.1% de la población) y 25.1% de los niños entre 13 y 18 años sufren de desórdenes de ansiedad en los Estados Unidos. Por otro lado, El Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH, por sus siglas in inglés) aproximadamente 17 millones de adultos (7.1%) han tenido al menos un episodio depresivo mayor. La depresión y la ansiedad son dos condiciones distintas pero muchas personas presentan ambas condiciones.
Los factores de riesgo para estas enfermedades mentales incluyen la herencia genética, la personalidad del individuo, las experiencias vividas y la química del cerebro. ¿Qué quieren decir con la química del cerebro? Las células del sistema nervioso conocidas como neuronas tienen una estructura bien peculiar. Las neuronas tienen unas largas proyecciones llamadas dendritas y axones que les permiten transmitir mensajes. Los neurotransmisores son compuestos químicos que se liberan el final del axon de una neurona permitiendo que el impulso nervioso pase a través de la sinapsis. La sinapsis es el área entre la neurona que libera el neurotransmisor y el receptor que lo recibe. Ejemplos de neurotransmisores incluyen la serotonina, dopamina, norepinefrina y acetylcolina.
Niveles bajos de serotonina pueden causar depresión o ansiedad. Los niveles pueden bajar por varias razones. Puede que el cerebro produzca menos del compuesto, o puede ser que no haya suficiente de su predecesor, el aminoácido triptófano. Los niveles también pueden estar bajos debido a que los receptores no reciben la serotonina una vez se libera. El grupo de drogas más común en el tratamiento de depresión y de desórdenes de ansiedad es conocido como Inhibidores Selectivos de la Recapacitación de Serotonina (SSRIs por sus siglas en inglés). Su función es inhibir el proceso de la reabsorción de la serotonina por la neurona que la liberó, permitiendo que la serotonina esté disponible para el receptor por más tiempo. Este grupo incluye drogas como Prozac, Zoloft, Celexa, Lexapro and Paxil.
Si usted o un ser querido está sufriendo de depresión o ansiedad, consulte a su médico para una evaluación y plan de tratamiento. No hay razón para sufrir en silencio.