Washington – Joe Bien necesita un nombre femenino para la recta final de su campaña. El exvicepresidente prometió que seleccionaría a una mujer para competir por la Casa Blanca en las elecciones de noviembre, pero ahora la cuestión es quién. ¿Será afroamericana, latina o blanca? ¿Moderada o progresista?
La respuesta sobre quién será su «vicepresidenta» se espera posiblemente para julio, según fuentes demócratas, que explicaron que el «casting» ya ha empezado con entre 6 y 8 aspirantes.
En medio de la pandemia, la campaña de Bien ha pasado a un segundo plano, por lo que el anuncio de quién sería la candidata demócrata a la Vicepresidencia podría devolverle impulso y romper con un ciclo de noticias dominado por las polémicas que cada día protagoniza el actual mandatario, Donald Trump.
Estos son los seis nombres que tienen más posibilidades de hacerse con la candidatura demócrata a la Vicepresidencia:
KAMALA HARRIS
Compitió con Biden en las primarias presidenciales demócratas y, en el primer debate entre los candidatos, le atacó por haberse opuesto en la década de los 70 a una política federal que buscaba favorecer la integración racial en las escuelas.
Harris, senadora afroamericana de 55 años, es uno de los nombres que suena con más fuerza para ser la compañera de fórmula de Biden. A los dos políticos les une el fallecido hijo del exvicepresidente, Beau, con el que Harris desarrolló una relación de amistad cuando ella era fiscal general de California y él ocupaba el mismo puesto en Delaware.
Harris es una oradora clara y famosa por sus preguntas incisivas. Su mayor desventaja: la izquierda no le perdona que, como fiscal general de California, fuera «dura» con acusados de pocos recursos, algo que también molesta a parte de la comunidad afroamericana.
AMY KLOBUCHAR
Klobuchar también se enfrentó a Biden en las primarias, destacó por su actuación en los debates y, a nivel nacional, se retrató como una candidata de centro que como representante de Minnesota en el Senado es capaz de empatizar con el «medio oeste» del país.
Por tanto, como posible candidata a la Vicepresidenta, Klobuchar podría poner en el bolsillo de Biden los estados de Wisconsin, Michigan y Pennsylvania, que fueron claves para la victoria de Trump en 2016.
Ya en el proceso de primaria, se retiró antes del «supermartes» e hizo campaña para que Biden venciera en Minnesota al progresista Bernie Sanders.
Sin embargo, la fortaleza de Klobuchar es también su debilidad: apela al centro, pero no capta ningún entusiasmo entre la izquierda y las minorías del partido.
CATHERINE CORTEZ MASTÓ
Mientras Trump ganaba las elecciones en 2016, Cortez Mastó se convertía en la primera latina en ser elegida para el Senado de EE. UU. y la primera mujer en representar al estado de Nevada en toda su historia. Cortez Mastó también conocía bien al hijo de Biden, Beau, ya que ella fue fiscal general de Nevada.
Nieta de un inmigrante de Chihuahua (México), ayudaría a Biden a mostrar un compromiso serio con la comunidad latina y eso podría ayudarle en estados, como Arizona y Florida. En su contra está su poca notoriedad a nivel nacional.
STACEY ABRAMS
La política afroamericana se convirtió en una de las estrellas del partido durante las elecciones legislativas de 2018 y estuvo muy cerca de ganar la gobernación de Georgia.
Perdió, pero no admitió la derrota y la misma noche de los comicios fundó una organización dedicada a garantizar el derecho al voto de las minorías, especialmente de hispanos y afroamericanos, que en el caso de Georgia fueron supuestamente borrados de la lista de votantes.
Su figura emociona a progresistas y afroamericanos. ¿La desventaja? Solo ha ejercido como legisladora estatal de Georgia, por lo que carece de experiencia a nivel nacional, y además enfrentó algunos problemas financieros que le hicieron deber unos 50.000 dólares en impuestos a Hacienda.
GRETCHEN WHITMER
Otra política que podría ayudar a Biden a conquistar el medio oeste de EE.UU. es Gretchen Whitmer, la gobernadora de Michigan que ha ganado fama por su decisión de cerrar la economía del estado para frenar al coronavirus, lo que provocó protestas de hombres armados. A pesar de las manifestaciones, Whitmer goza de gran popularidad en el estado de Michigan, crucial para Trump en las presidenciales de 2016 y que ella ganó en los comicios a la gobernación de 2018 con un margen de diez puntos, después de una década de dominio republicano. Sin embargo, tiene poca experiencia, ya que solo ha sido gobernadora durante dos años; y, como Klobuchar, tampoco entusiasma al ala izquierdista del partido.
ELIZABETH WARREN
Quien sí sabe dejar en éxtasis a la base demócrata es la senadora Elizabeth Warren, que podría ayudar a poner paz entre progresistas y moderados del partido si es elegida candidata. Experta en leyes de bancarrota y antigua profesora en Harvard, Warren ideó e impulsó las políticas que aumentaron las regulaciones financieras tras la crisis de 2008 y, por esa misma razón, parece la aspirante idónea para liderar la recuperación económica del país en medio de la pandemia.
¿Su mayor desventaja? Biden y Warren se batieron en el proceso de primarias y dejaron claro que difieren en una gran cantidad de temas, como la sanidad.