Según un reciente estudio preparado por un grupo de analistas de Locuststreet ( LSG), crece significativamente la influencia del voto hispano en las próximas elecciones de mitad de mandato de 2022.
El estudio ofrece datos clave para entender el comportamiento del voto hispano. El electorado hispano está en constante crecimiento y se calcula que 34,5 millones de estadounidenses de origen hispano pueden votar este 8 de noviembre. La población hispana representa ya el 14,3 % de los ciudadanos con derecho al voto. En 2008 que representaban entonces el 9,2 % de la población con derecho a ir a las urnas en EE. UU.
Los estados con mayor porcentaje de votantes hispanos respecto al total del electorado son: Nuevo México, California, Texas, Arizona, Florida, Nevada, Colorado, Nueva Jersey y Nueva York.
Los temas más relevantes para los hispanos son la economía e inflación, los servicios de salud, la educación, la violencia armada y seguridad; y el aborto.
El estudio analiza en profundidad más de 30 elecciones clave en las que los hispanos serán decisivos en 2022. Los hispanos ya deciden elecciones y lo volverán a hacer en 2022. El censo de 2020 mostró que 62 millones de hispanos viven en Estados Unidos. Su fuerza electoral es cada vez más importante y trasciende a estados que tradicionalmente han tenido una mayor proporción de votantes hispanos. Su movilización y apoyo a las diferentes candidaturas decidirán elecciones en todo el país.
¿El voto hispano más peleado que nunca?
Para obtener resultados similares a los que pronostican las encuestas entre los votantes hispanos deberíamos retroceder a la época de George Bush. Los demócratas pueden ver peligrar asientos clave en el Congreso por el giro a la derecha que pronostican muchas encuestas entre los hispanos. El voto hispano no es propiedad de ningún partido y en esta elección está siendo muy disputado por los republicanos, que esperan cimentar muchas victorias estratégicas gracias al apoyo de votantes hispanos.
¿Entienden los partidos qué es lo que moviliza a los hispanos a votar?
Según los datos, lo que se observa, es que, en gran medida, los hispanos se preocupan de lo mismo que el resto de los votantes de Estados Unidos. Es fundamental entender que las comunidades hispanas llevan tiempo arraigadas en el país sus preocupaciones van por lo tanto muy ligadas a las preocupaciones que vemos en las encuestas del resto de estadounidenses. La economía, inflación, seguridad, salud… etc. Es importante escuchar y entender lo que preocupa a las comunidades y no suponer lo que se piensa que les preocupa.
Asignatura pendiente
La participación; una de las cuestiones que más se ha achacado a la influencia del voto hispano en las elecciones, es su baja tasa de participación con respecto a otros grupos. Las pasadas elecciones del 2020 presentaron una participación récord y se espera que continúe creciendo esta buena tendencia entre los hispanos. Una mayor movilización, conlleva, sin duda un mayor peso electoral.
Un electorado diverso
Los votantes hispanos son probablemente uno de los grupos más heterogéneos del país. Esta elección pondrá de manifiesto tendencias regionales y estatales, distintas entre el voto hispano, cada vez más importantes. Ambos partidos y analistas deben comenzar a tomar nota de estas tendencias para entender mejor el comportamiento de este grupo de votantes cada vez más numeroso.