El control partidista de la Cámara de Representantes del estado de Pensilvania estuvo en juego el martes cuando los legisladores del estado, sus familias y simpatizantes llegaron al Capitolio estatal para prestar juramento para la nueva sesión legislativa de dos años.
Los representantes estatales deben elegir un orador para que se desempeñe como presidente de su cámara, pero las elecciones de noviembre fueron tan reñidas, y complicadas por la muerte de un demócrata del condado de Allegheny y las renuncias de otros dos, que lo que normalmente es un evento protocolario se volvió un momento de drama e incertidumbre.
La Cámara estaba lista para votar por el presidente después de que los miembros prestaran juramento al mediodía en el pleno de la Cámara, pero la secretaria principal, Brooke Wheeler, anunció que se detendría la sesión de votación y no había indicación de cuándo se llevará a cabo la votación del presidente.
Los demócratas obtuvieron una red de 12 escaños, la cantidad mínima necesaria para hacerse cargo de la cámara, 102-101, después de más de una década en minoría. Pero ese margen ahora es de 101-99 para los republicanos porque el representante estatal Tony DeLuca murió de cáncer un mes antes de ganar la reelección, la representante Summer Lee renunció para convertirse en miembro del Congreso y el representante Austin Davis renunció antes de convertirse en vicegobernador.
Casi una cuarta parte de la Cámara son miembros recién elegidos, rotación impulsada por jubilaciones y derrotas de titulares causadas en parte por la redistribución de distritos que ocurrió después del censo de 2000.
El orador durante la sesión 2021-22, el representante Bryan Cutler, republicano por Lancaster, dijo que ya no quiere el trabajo. Como líder designado por el Partido Republicano de la Cámara, Cutler presentó una demanda aún pendiente, diseñada para retrasar las elecciones especiales para llenar los escaños de Lee y Davis hasta mayo.
La líder demócrata de la Cámara, la representante Joanna McClinton, de Filadelfia, se ha movido para programar esas elecciones para el 7 de febrero, cuando los votantes elegirán al sucesor de DeLuca.
En el Senado, la republicana Kim Ward, del condado de Westmoreland, fue elegida para servir como presidenta de la cámara, la presidenta pro tempore. Ward fue elegida para el puesto por sus compañeros republicanos, que tienen una mayoría de 28 a 22 en el Senado.
