GLENDALE, Arizona, EE.UU. —Si la temporada 2022-2023 de la NFL fue marcada por la retirada de Tom Brady, considerado el mejor jugador de siempre, la noche de Glendale confirmó que en el fútbol americano hay talento para rato: el de Mahomes, un guerrero capaz de sobreponerse a una grave lesión de tobillo, y el de Hurts, que se convirtió en el primer mariscal de campo capaz de anotar tres ‘TD’ a la carrera en un Super Bowl.
Ya sea por aire o por tierra, Jalen Hurts fue el ejemplo de una ofensiva dominante de los Eagles en el Super Bowl. Simplemente no fue suficiente para superar a Patrick Mahomes.
Hurts brindó una actuación histórica en el máximo escenario del fútbol americano, pasando para 304 yardas y un touchdown y acumuló otras 70 yardas y tres anotaciones, así como una conversión de dos puntos para empatar el encuentro en el último cuarto.
Pero Hurts no pudo hacer nada desde la banca por Filadelfia mientras Mahomes encaminaba a los Chiefs al gol de campo de la victoria a 8 segundos del final en el triunfo de 38-35 del domingo.
“Es duro», dijo Hurts. “Nos esforzamos al máximo para tener esta oportunidad y quedarnos corto es duro. Siempre quedan muchas cosas para aprender, tener una oportunidad para reflexionar en algunas de las cosas que no supimos hacer o que pudimos haber hecho. Hay mucho para aprender”.
A pesar de cargar con la derrota, Hurts terminó con una de las actuaciones más productivas de la historia del Super Bowl, pero se convirtió en el primer pasador en perder el juego grande luego de llevar a su equipo a conseguir al menos 35 puntos.
Impuso récord de más yardas terrestres para un quarterback en el Super Bowl, empató la marca de Terrell Davis de más touchdowns por tierra para un jugador e igualó el récord de James White de 20 puntos anotados. También se unió a los inmortales Steve Young y Joe Montana como los únicos con al menos 370 yardas totales y cuatro touchdowns (totales) en un Super Bowl.
Pero la temporada de despunte terminó con Hurts detrás de Mahomes en la votación a MVP y en el Super Bowl, donde se convirtió en el primer jugador en perder el partido por el campeonato a pesar de acumular cuatro touchdowns.
Hurts tuvo una última oportunidad y su pase desesperado se quedó muy corto mientras abandonaba el campo visiblemente decepcionado. Fue una forma aplastante de ponerle fin a una actuación brillante.
Hurts anotó en una de sus emblemáticas jugadas personales en la primera serie, lanzó un pase de touchdown de 45 yardas a A.J. Brown en la primera jugada del segundo cuarto y añadió una carrera de anotación de cuatro yardas a finales de la primera mitad antes de montar una ofensiva crucial en el último periodo.
Encontró a DeVonta Smith en un pase de 45 yardas y luego coronó la serie con un acarreo de dos yardas a las diagonales. Luego consiguió la conversión de dos puntos con otra jugada personal. Después de eso se convirtió en un espectador más.
Lo único que no le salió bien el domingo fue cuando soltó un balón mientras lo cambiaba de mano, lo que derivó en una devolución de Nick Bolton de 36 yardas a las diagonales en la primera mitad.
Pero ese error tampoco limitó a Hurts, quien sumó una carrera de 28 yardas en cuarta oportunidad para mantener con vida la siguiente serie, la cual culminaría con su acarreo anotador de cuatro yardas.
Puede salir con la cabeza alta Hurts, que dejó el terreno de juego tras lanzar 304 yardas, con 27 de 38 en pases y un ‘TD’, además de sus tres a la carrera. Vio líneas de pase extraordinarias y fue protagonista de un auténtico recital en la primera mitad, cuando apenas concedió ocho minutos a la ofensiva de los Chiefs.
Y en la segunda mitad, cuando su equipo fue sobrepasado por la magnífica reacción de los Chiefs, intentó rebelarse al destino con un magistral pase de 46 yardas para impulsar el empate a 35.
Es un mariscal de campo que llevó toda la temporada jugando los cuartos downs como si fueran un segundo, negándose a entregar el balón y buscando la jugada decisiva. Carácter y talento de un chico de 24 años que dan derecho a seguir soñando con la gloria a los Eagles.
Un retorno de 65 yardas tras el ‘punt’ de los Eagles, el más largo de la historia del Super Bowl, obra de Kandarius Toney, llevó al ‘TD’ de Skyy Moore que abrió una brecha en el marcador.
Pero eso no fue suficiente para contener el talento y la clase de Hurts, que conectó su tercer pase de ‘TD’ y se encargó personalmente de la transformación de dos puntos para el empate 35-35.
Fue entonces cuando Mahomes volvió a ser decisivo. Lo hizo con una carrera de 26 yardas que abrió el camino para el gol de campo de Butker para el 38-35.
Con información de AP y EFE