En febrero de 2013 se inició en California “Semilla de Bienestar” con la ayuda y patrocinio de Esperanza. El jueves 10 de septiembre de 2015, la Junta Directiva del Día de la Oración Puerto Rico aprobó por unanimidad la renovación y reorganización de Semilla.
Semilla de Bienestar contribuye al desarrollo de las comunidades a través de la información, educación, concientización, orientación, empoderamiento y acción frente a los desafíos dentro del país y en la diáspora. Su misión es impulsar creativamente el desarrollo de programas para construir comunidades más fuertes a través de la colaboración, cooperación, capacitación de la persona y sus grupos y organizaciones civiles y barriales.
Edwin Vargas es presidente y fundador de esta organización que trata de ser un puente de enlace, solidaridad y unidad entre Puerto Rico y la comunidad hispana en EE. UU.
“Se funda Semilla de Bienestar, pensando en proyectos en los que podamos ayudar, como estudiantes de las escuelas públicas, familias pobres. Atender a víctimas de abuso doméstico o de violencia de género. Pero también con el compromiso de crear algún tipo de diálogo entre las diferentes comunidades de Puerto Rico y los Estados Unidos”, explica.
Para Vargas, el intercambio de ideas y propuestas permite conocer de una manera más directa la realidad y el contexto de lo que viven las comunidades y sus circunstancias, “…en términos de pobreza, desempleo, servicio médico y oportunidades de desarrollo para la juventud; es parte de lo que hacemos en Semilla”.
La falta de esperanza afecta la comunidad
Semilla cuenta con un programa de becas para alumnos de escuelas públicas; dirigidas a estudiantes que aspiran ingresar a un colegio o universidad y, por distintas razones, como la económica u otras, no pueden cumplir ese sueño; Semilla busca aportar para que ese niño mantenga la esperanza de progresar.
También cuenta con una red de contactos con universidades en Puerto Rico, que facilita información para los estudiantes que aspiran a seguir estudios superiores. “Trabajamos en solidaridad con organizaciones especializadas; hay programas que nos contactan directamente y así podemos apoyar con insumos escolares básicos, por ejemplo”.
Hay programas federales que localizan a las víctimas de abuso doméstico. Semilla colabora con ellos, aportando enseres nuevos para que estas personas tengan un nuevo espacio y hogar. “Este año comenzamos otro proyecto donde aquellas víctimas de abuso doméstico que tengan algún talento y quieran emprender su propio negocio, como una peluquería, una cafetería, una panadería o guardería, se les brinda el apoyo para comenzarlo”.
Otro proyecto apoya la educación pública, en las escuelas que sufren pobreza mayor; se les brinda el apoyo reconstruyendo los espacios, brindando recursos y mantenimiento. “Si faltan equipos, nosotros unimos esfuerzos y tratamos de aportar recursos para que la educación sea de alta calidad”.
La oración de fe de Puerto Rico
Semilla es una organización basada en la fe, y se remonta a la primera fundación, hace casi 30 años, en el Día de la Oración de Puerto Rico. “Tiempo después decidimos lanzar esta nueva organización, Semilla, mucho más amplia, y que estuviera comprometida con proyectos comunitarios, pero a la vez, como expresión de nuestro compromiso y agradecimiento”.
“Hace unos días celebramos el aniversario 29, y por casi 20 años se hizo de manera presencial, pero, con la pasada pandemia, se empezó una nueva versión digital. Esto ayudó mucho, porque permitió que las familias puertorriqueñas en diferentes lugares del mundo se pudieran conectar. Pudimos orar por temas muy importantes para Puerto Rico y los EE. UU.”, asegura Vargas.
Estos temas incluyeron la violencia intrafamiliar, que a menudo se activa por personas que perdieron su empleo, sus hogares, y el impacto que tuvo el Covid sobre muchos hogares, donde muchos de sus proveedores perdieron la vida.
“Otra oración fue por la dramática realidad que estamos viviendo de los tiroteos en las escuelas y centros comerciales. Es trágico que todas las semanas estemos teniendo un episodio donde personas y niños inocentes estén muriendo”, lamentó. También se reflexionó sobre el problema ambiental y el calentamiento global que está afectando al mundo sin importar en qué país se viva. “En Latinoamérica, donde antes llovía tanto, ya hay regiones sin lluvia, lo que afecta la agricultura y muchas personas tienen que abandonar sus países”.
También se oró por la crisis migratoria. “En este tema reconocimos y le pedimos perdón a Dios por, de alguna manera, olvidar a las comunidades pobres. Tenemos que tener muy claro que el Señor nos convoca a nosotros a servir a los menos favorecidos. Pedir perdón si hemos olvidado a aquellos seres humanos que sufren porque no tienen nada”, manifestó.
El evento del “Día de Oración”, como también los proyectos de Semilla, se pueden conocer a través de la página semilladebienestar.org, una página bilingüe. “Las personas pueden informarse allí y encontrar nuestras vías de contacto. Es muy interesante lo que hacemos y pueden conocer mejor nuestro trabajo”, terminó Vargas.
En la jornada de oración, Esperanza estuvo presente a través de Anthony Ramos, director de Proyecto en el programa de Desarrollo de Liderazgo Juvenil Cristiano.
¡Puertorriqueño, pa’ que sepas!
Anthony Ramos, M. Div.
4 de mayo de 2023.
Nuestro Padre Celestial
Con énfasis en “Nuestro”
Sin importar si somos
puertorriqueños de la isla
O de la diáspora
Nuestras raíces provienen de la misma Flor
Como una Flor de Maga
Nativo de Borinquen
Aunque he sido cultivado en otros lugares
Como puertorriqueño de tercera generación
Mi orgullo étnico se nutre de mi herencia profunda
Nuestro Padre Celestial
Énfasis en “Nuestro”
Oramos por un sentido de unidad, unidad entre unos y otros
Que seamos rápidos en empatizar y entender
Más rápidos que la capacidad de compartir ubicaciones
Que nuestras diferencias generacionales
no nos impediría escuchar el uno al otro
Como cuando escucho los cuentos de mi abuela
Concretamente su historia migratoria
Como la forma en que viajó a una tierra extranjera
A los 13, lo tomó como un plan de Dios
Para aventurarse a través de la arena
A un país… lleno de posibilidades.
Renunciar a la educación formal
Para acumular riquezas en ambos destinos
presentes y futuros
y muy posiblemente
La razón por la que tengo tres títulos académicos
es en gran parte su legado
que ella emprendió por mí y por mi familia
Y aunque mi idioma principal
puede que no sea el mismo que el de mi abuela
No nos impidió de ningún modo
entendernos unos a otros
Y cómo encajamos en las historias de los demás
Nuestro Padre Celestial
Oramos por la solidaridad
Y no pido esto como poca cosa
Que nuestras distancias geográficas
no nos distancien
De ver la red interconectada de nuestra gente
En la que encontramos nuestro lugar
Como cristianos, todos somos peregrinos
Como puertorriqueños, solo la mayoría lo somos
Pero somos puertorriqueños, a pesar de todo
Buscando el bienestar de las ciudades
por donde se dispersaron nuestros antepasados
Rezo para que caigan los estereotipos y barreras
Que creamos hacia nuestra propia gente
¿Desde cuándo ‘jíbaro’ se convirtió en un término despectivo
vinculado a quienes hablan poco inglés?
¿Y por qué soy menos puertorriqueño
porque sueño como un gringo?
Te pido que nos concedas, lo que le concediste
Al difunto Reverendo Orlando Costas
El regalo de vivir “una auténtica conversión cultural”
Que los puertorriqueños tanto de cerca como de lejos
Ambos, jóvenes y viejos
Ambos, de lengua dominante inglés o español
Tengamos pertenencia y orgullo para decir,
“¡Yo Soy Boricua, pa’que tú lo sepas!”
Amén
En este enlace se puede ver el pasado evento https://fb.watch/ku7HWtCFLZ/
29 años del “Día de la Oración” de Puerto Rico
El jueves 5 de mayo de 1994 se realizó la primera convocatoria de un Día de Oración, bajo el lema «Buscando el Rostro de Dios». Edwin Vargas había sentido el llamado de Dios en su residencia en California para viajar a Puerto Rico y para comenzar a organizar allí un importante encuentro con la participación de varios pastores y el liderazgo ministerial de la Isla.
Fue una celebración de solidaridad con el esfuerzo anual «Día Nacional de Oración» de los Estados Unidos. El orador principal en esa ocasión fue el Dr. José D. Camacho, Presidente de “Puerto Rico al Encuentro con Dios”. Posteriormente se formó un Comité Directivo, bajo la coordinación de Edwin, para organizar y desarrollar una alianza ministerial entre la comunidad pastoral y el liderazgo ministerial de Puerto Rico para la celebración anual.
El primer Comité Directivo estuvo integrado por el Rev. Dr. Saturnino “Nino” González, Dr. Julio Aponte, Dr. José D. Camacho, Rev. Ramón Ayala Cuervos, Dr. Ángel Marcial, Rev. David Casillas Galarza, Michael LoPresti y Edwin Vargas.
La Jornada de Oración convoca a líderes religiosos y de diferentes sectores de la sociedad a orar pidiendo perdón, misericordia y dirección. Se ora a Dios pidiendo ayuda para asumir un compromiso sostenido en la solución de los problemas sociales, morales y espirituales del pueblo boricua y del mundo entero.
Numerosos proyectos, en cooperación con la Universidad Interamericana de Puerto Rico han fomentado la comunicación con diferentes sectores de la comunidad, con la ayuda de la dirigencia pastoral y el liderazgo del país. La UIPR copatrocina y apoya anualmente el evento, en el que miles de creyentes de Puerto Rico y su diáspora participan cada año, junto a otros grupos de hispanos del continente.
En octubre de 2011, la organización inició una nueva etapa con nueva Junta Directiva y un Comité Interdisciplinario para contribuir al pleno desarrollo de la comunidad boricua.
El 5 de mayo se lanzó el nuevo concepto Conferencia-Diálogo-Oración. Este evento combinó conferencias, reflexiones, datos comunitarios, estudios de investigación, presentación de propuestas, música y oración. Las propuestas iban dirigidas a desarrollar programas para ayudar a las comunidades a superar sus desafíos.