La “vieja guardia” se retira: Biden transferirá la presidencia a Trump el 20 de enero y su amigo el senador Tom Carper (D-Del), se despidió en días pasados en el Senado de los EE. UU. recibiendo los elogios de sus compañeros –tanto los de su partido como los de la oposición– . Unos y otros han reconocido sus esfuerzos a lo largo de toda su vida política como promotor incansable de iniciativas legislativas bipartidistas para conseguir soluciones duraderas.
“Incluso en el entorno polarizado actual, todavía es posible lograr mucho para nuestro país, nuestro planeta y sus habitantes”, dijo Carper en su discurso de despedida.
Sugirió algunas directrices para la convivencia política en la próxima legislatura.
“Sólo porque alguien sea tu adversario, no significa que tenga que convertirse en tu enemigo”.
Carper recordó en su discurso a los Padres Fundadores y cómo sus principios siguen siendo ciertos hoy en día.
“Cuando juramos lealtad a la bandera o hacemos un juramento para defender la Constitución contra enemigos, extranjeros y nacionales, no lo hacemos con una persona o un partido, prometemos nuestra lealtad a nuestro país y a nuestra Constitución”.
También los Padres Fundadores, y en particular Benjamin Franklin, estuvieron presentes en la iniciativa legislativa presentada en días pasados por el otro senador de Delaware, Chris Coons (D-Del) quien conjuntamente con John Boozman (R–AR) patrocinaron un proyecto de ley bipartidista para colocar una estatua de Franklin en la Rotonda del Capitolio, celebrando sus contribuciones a la fundación de los EE. UU..
Para Coons “El legado de Benjamin Franklin como estadista y político, impresor y editor, filósofo y patriota, e inventor y científico dio forma a los principios de la democracia estadounidense y los ideales por los que seguimos luchando hoy”
Como único firmante de los tres documentos que nos separan de los británicos, sus contribuciones a la historia estadounidense son, para la congresista Chrissy Houlahan (D-Pa), quien apoya desde el Congreso junto con Brian Fitzpatrick (R-Pa), la medida, “la base de nuestra gran nación”.
Houlahan y Fitzpatrick, orgullosos representantes de Pensilvania, se sienten “honrados de liderar este esfuerzo bipartidista para consagrar el legado de Benjamin Franklin en el corazón del Capitolio de nuestra nación”.
El legado central de Franklin –y el resto de Padres Fundadores– es su esfuerzo por mejorar la vida cívica. Esta misión –hoy como entonces– continúa siendo tarea fundamental de los medios de comunicación. Franklin no dudó en servirse de sus propias publicaciones para mejorar la vida de los ciudadanos, y si bien la prensa ha evolucionado pasando de ejercer solo un periodismo de rendición de cuentas a buscar el empoderamiento de las personas para que sean ellas las que exijan cuentas a los que tienen el poder, hay que resaltar que los medios tienen un papel primordial como guardianes de la democracia.
Cuando al salir de la Convención Constitucional en Filadelfia en 1787, le preguntaron a Franklin qué tipo de gobierno habían creado los delegados, su respuesta fue: “Una república, si pueden conservarla”. Quiso decir que las repúblicas democráticas no se fundan simplemente en el consentimiento del pueblo, sino que también dependen de la participación activa e informada del pueblo para la salud continua de la democracia.
Dos días después de su discurso en el Senado, Carper recibía el “2024 Legacy Award”otorgado por la Oficina de Turismo del sur de Delaware. En sus palabras de agradecimiento recordó nuevamente los fundamentos de su discurso del día anterior y habló de la democracia evocando la frase de Churchill (“La democracia es el peor sistema de gobierno, a excepción de todos los demás”).
Mientras el regreso de Trump a la Casa Blanca ha preocupado a muchos en los medios sobre cómo le irá a la industria del periodismo y por ende a la democracia, en una entrevista con Fox News, Trump ha reconocido que es “vital tener unos medios de comunicación libres, justos y abiertos” y que siente que tiene “una obligación con el público estadounidense y con nuestro propio país de estar abierto y disponible para la prensa”.
La estatua de Franklin, que a buen seguro se erigirá en el Capitolio, será no solo un tributo a sus contribuciones y un testimonio del papel vital de Pensilvania en la historia estadounidense sino también un recordatorio a todos de la obligación de mantener la promesa de libertad para las generaciones futuras.
Recogiendo ese espíritu, el senador Carper cerró su extensa, fructífera y elogiada trayectoria política invitándonos a todos –medios incluidos– a mantenernos “moviéndonos en el mundo libre”. Él aseguró que seguirá haciéndolo.