La explosión que sacudió este viernes la ciudad estadounidense de Nashville vino de un vehículo con una grabación que avisaba de que «una bomba explotaría en los próximos 15 minutos», dijo en una rueda de prensa el jefe de la policía local, John Drake.
Esa fuente explicó que se están tomando precauciones para registrar la zona afectada, pero no hay indicaciones de que haya ningún otro aparato explosivo.
Poco antes de las 6.00 hora local (12.00 GMT), la policía local respondió a una llamada que alertaba de disparos en la zona; pero, una vez que llegaron allí no vieron ningún signo de un tiroteo y se dieron cuenta de que había un vehículo con una grabación que avisaba de que «una bomba explotaría en los próximos 15 minutos».
Los agentes se apresuraron a llamar puerta por puerta para evacuar a los vecinos del centro de Nashville y minutos después se produjo la explosión.
En la misma rueda de prensa, el portavoz de la Policía, Don Aaron, explicó que el vehículo era una autocaravana y aún no se sabe si había alguien dentro cuando explotó.
La Policía de Nashville ya había dicho esta mañana que se trataba de un «acto intencionado», aunque por el momento no ha señalado a ningún responsable.
Varias personas están siendo interrogadas en la estación de policía, pero Aaron rechazó ofrecer más detalles.
Tres personas resultaron heridas y fueron transportadas a hospitales cercanos, pero ninguna está en condición crítica.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) va a liderar la investigación en la que están participando múltiples cuerpos de seguridad, incluida la policía y el cuerpo de bomberos de Nashville, así como la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos, especializada en atentados con bombas.
El FBI es la agencia que se encarga de investigar posibles crímenes federales, como actos de terrorismo.
El presidente saliente Donald Trump, que se encuentra en su club privado de Mar-a-Lago en Florida, fue informado este viernes de la explosión y seguirá recibiendo información actualizada a lo largo del día, indicó en un comunicado uno de los portavoces de la Casa Blanca, Judd Deere.
Cuando se produjo la explosión, se pudieron ver llamas y humo negro en el centro de Nashville, el corazón turístico de la ciudad que está repleto de bares, restaurantes y establecimientos donde escuchar música en directo.
Nashville, capital del sureño estado de Tennessee, es conocida como «Music City, USA» (Ciudad de la Música) debido a su importante industria discográfica.