La Navidad es una época llena de alegría y celebración, pero también puede tener un impacto negativo en el medio ambiente. En nuestro camino hacia los objetivos de desarrollo sostenible (ODS), es importante practicar un consumo responsable, especialmente durante esta maravillosa temporada.
Comencemos por la elección del árbol de Navidad. Muchas personas prefieren la experiencia auténtica de tener un árbol natural en su hogar. El aroma fresco y natural del árbol, junto con su apariencia única, puede crear una atmósfera más tradicional y festiva. Si optas por un árbol natural, elige uno cultivado de manera sostenible, de preferencia de una plantación certificada. Los árboles naturales también ayudan a mejorar la calidad del aire, ya que absorben dióxido de carbono y liberan oxígeno. Al finalizar la temporada navideña, asegúrate de reciclar o compostar el árbol en lugar de desecharlo en la basura.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la tala de árboles naturales para este uso, tiene un impacto ambiental negativo. Además, solo se pueden utilizar por una temporada.
En cambio, los árboles de Navidad artificiales son más duraderos y se pueden reutilizar año tras año, lo que los hace más económicos a largo plazo. No requieren cuidados especiales como regarlos, pero debes asegurarte de que estén fabricados con materiales no tóxicos. También necesitarás espacio de almacenamiento.
Los artificiales ofrecen una mayor variedad de tamaños y estilos, lo que los hace adaptables a diferentes espacios y preferencias estéticas. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la fabricación y transporte de árboles artificiales también genera emisiones de gases de efecto invernadero.
En última instancia, la elección entre un árbol de Navidad artificial y uno natural depende de las preferencias personales y las consideraciones individuales de cada persona.
Independientemente, también puedes tomar medidas para hacer tus celebraciones navideñas más sostenibles. Opta por iluminación eficiente, como luces LED de bajo consumo energético, que consumen menos electricidad y tienen una vida útil más larga. Considera utilizar temporizadores o sensores de movimiento para reducir el tiempo de funcionamiento y ahorrar energía.
Utiliza decoraciones navideñas fabricadas con materiales sostenibles, como ramas de árboles, piñas o flores secas. También puedes reutilizar materiales como papel, cartón o tela para crear tus propias decoraciones personalizadas y únicas.
A la hora de elegir regalos para tus seres queridos, considera opciones sostenibles como productos hechos con materiales reciclados o reutilizables. También puedes optar por regalos intangibles, como experiencias o donaciones a organizaciones benéficas, en lugar de objetos materiales que pueden generar residuos.
Durante las celebraciones, es importante practicar el consumo responsable de alimentos para reducir el desperdicio. Antes de ir de compras, calcula cuánta comida necesitarás para evitar comprar en exceso y desperdiciar alimentos.
Celebrar una Navidad sostenible implica tomar decisiones conscientes y responsables en cuanto a los regalos, la decoración, la comida y las acciones solidarias. Al incorporar estas recomendaciones, estarás contribuyendo a la protección del medio ambiente y promoviendo un estilo de vida más sostenible.
¡Te deseo una Navidad llena de alegría y conciencia ambiental!
* YERMYS PEÑA es arquitecta y constructora. Experta en ciudades inteligentes y sostenibles. https://arquitecturayp.com/