La caravana “Todos Somos Florida” partió este lunes desde California hacia Arizona, en un recorrido que prevé escalas en varios estados para ganar apoyos y “educar” sobre las políticas antiinmigrantes del gobernador floridano, el republicano Ron DeSantis.
Tras realizar varios eventos en Los Ángeles durante el fin de semana, una docena de vehículos con más de 50 personas salieron este lunes por la mañana de esta ciudad hacia el estado de Arizona como parte de la caravana que partió el 23 de junio desde San Diego y espera llegar el 30 de junio a Tallahassee, capital de Florida, y manifestarse contra la ley antiinmigrante SB 1718, que entra en vigor el 1 de julio.
La caranava hizo dos paradas más en ciudades californianas (San Bernardino y Coachella).
“Esperamos que esta caravana se convierta en un convoy con muchas personas desde sus ciudades, conscientes de esta lucha”, dijo a EFE Juan José Gutiérrez, director de la Coalición Derechos Plenos para los Inmigrantes, quien viaja en la caravana.
Los activistas tienen programadas manifestaciones en cada una de las paradas que tienen programadas, donde se entrevistarán con ciudadanos y líderes.
“Estas charlas con alcaldes, funcionarios y los mismos trabajadores nos ayudan a educar a estas personas sobre los ataques de DeSantis, y aunque parezca que el esfuerzo es muy pequeño, vamos ganando adeptos y se pasa la voz”, declaró Gutiérrez.
Explicó que están usando una estrategia similar con la que se derrotó la Propuesta 187, una ley aprobada por los votantes de California en 1994 que fue las más duras de la historia del estado contra los indocumentados y que marcó el comienzo de las protestas masivas en favor de los inmigrantes sin estatus legal en Estados Unidos.
Esa iniciativa pretendía prohibir a los indocumentados el acceso a servicios de salud y educación pública en California, y abogaba por la deportación de inmigrantes al exigir a los maestros, médicos y policías que denunciaran a cualquier extranjero sospechoso de no tener estatus legal.
La Propuesta 187 nunca entró en vigor por una demanda que finalmente logró que una corte la declarara inconstitucional.
“En Florida también se va a utilizar esa estrategia. Tenemos conocimiento de que hay un equipo legal que presentará una demanda, pero no podemos dejar esto en manos de los abogados. Lo primero es crear conciencia de lo peligrosas que son estas iniciativas y personas como De Santis”, indicó Gutiérrez.
Con este mensaje la caravana hará paradas en Phoenix y Tucson (Arizona); Las Cruces (Nuevo México); El Paso, San Antonio y Houston (Texas), y Nueva Orleans (Luisiana). Un grupo de Chicago (Illinois) también saldrá para unirse a la caravana.
La parada final es la capital de Florida, donde los activistas esperan llegar el 30 de junio para apoyar un boicot de varios días.
La líder sindical Dolores Huerta también se unirá al esfuerzo.
