El número de menores de edad que vive solo con su madre se ha duplicado en Estados Unidos en solo 50 años, según un informe de la Oficina del Censo divulgado este lunes. En 1968, el 85 % de los menores de 18 años en Estados Unidos vivía con su padre y su madre, casados o no, y para 2020 sólo el 70 % vivía en hogares con la presencia de ambos progenitores.
Por contra, en la actualidad más de dos tercios de los niños hispanos en Estados Unidos viven con su padre y madre en el hogar, en tanto el 24 % vive sólo con la madre, señaló el informe.
«La observación de estas tendencias es importante porque los contextos en los cuales viven los niños pueden tener implicaciones para sus logros académicos, la internalización de problemas, como la depresión y la ansiedad, y la externalización de problemas como la ira y la agresión», afirmó el documento.
Aunque la situación más común de vida de los niños es en hogares con el padre y la madre presentes, el caso de niños que viven solo con la madre es el segundo más habitual, y el año pasado había 15,3 millones de niñas y niños en esa situación.
En el caso de los hispanos, en 2020 el 61,9 % de los niños vivía al amparo de padre y madre casados, y otro 6 % con padre y madre no casados.
Casi uno de cada cuatro menor de edad vivía sólo con la madre, y un 4,1 % en hogares donde solo el padre estaba presente.
Por comparación, el 78,6 % de los niños blancos vivía con ambos progenitores, casados o no; el 13,4 % sólo con la madre y el 4,7 % sólo con el padre en el hogar.
Entre los afroamericanos, el 41,3 % de los niños vivía en hogares donde estaban presentes el padre y la madre; un 46,3 % vivía sólo con la madre, y un 4,5 % sólo con el padre.
«La vida en hogares sin la presencia de padre o madre era más común para los niños afroamericanos, con un 8 %, seguidos por los hispanos con 4 %, y los blancos no hispanos con un 3 %», añadió el informe.