El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, debe priorizar los derechos humanos en su futura Administración y establecer un plan integral que afronte la discriminación racial y un trato justo a los inmigrantes, afirmó este jueves Human Rights Watch (HRW).
Según la organización humanitaria, la próxima administración «no solo debe deshacer las políticas regresivas» aplicadas en los últimos cuatro años por la Administración del presidente Donald Trump, sino «promover el respeto por los derechos humanos tanto en el país como en el extranjero».
Esto incluye abordar el racismo sistémico, el cambio climático y el derecho a la salud, incluidos los derechos sexuales y reproductivos, y apoyar a los defensores de los derechos humanos en todo el mundo, no a líderes despóticos, dijo HRW en un comunicado.
«El presidente electo Biden debería escuchar el mensaje de los votantes que quieren ver justicia racial, atención médica asequible y políticas económicas que protejan el planeta y a los necesitados», dijo Kenneth Roth, director ejecutivo de Human Rights Watch.
«Debería actuar con rapidez para revertir las políticas de la administración Trump más dañinas y ayudar a construir una sociedad en la que todas las personas vivan con dignidad y libertad».
Entre las recomendaciones de la organización a la próxima administración Biden está hacer frente a la discriminación racial sistémica e histórica de los Estados Unidos, apoyar leyes y políticas que aborden las disparidades raciales en el sistema legal penal, y tratar a los inmigrantes de manera justa y con dignidad.
Así mismo, le pide apoyar a los más necesitados afectados por la crisis de la covid-19, trabajar con el Congreso para garantizar el acceso a la atención médica, así como promover la igualdad de género y prohibir la discriminación por la orientación sexual.
En cuanto a política internacional, HRW le pide cumplir su promesa de reintegrar al país en los acuerdos de París sobre cambio climático, detener la retirada de la Organización Mundial de la Salud y restablecer la financiación al Fondo de Población de la ONU.
Finalmente, le pide revocar la orden que autoriza sanciones destinadas a socavar el trabajo de la Corte Penal Internacional y dejar de vender armas a violadores de los derechos.
La Administración Biden debe volver a comprometer a EE.UU. con el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, aceptando las recomendaciones de su informe anual y cumpliendo sus dictámenes, agregó.
«No es suficiente que la calamitosa era de Trump esté llegando a su fin. Biden tendrá que liderar una gran transformación si Estados Unidos quiere ser una voz creíble sobre los derechos humanos en todo el mundo», aseguró Roth.