El mes en el que se honra la herencia y la contribución de la mujer a la sociedad y a la historia de Estados Unidos nos invita a dirigir la mirada hacia los múltiples ámbitos en los que la ardua batalla por la equidad y la inclusión poco a poco ha ido dando frutos.
El emprendimiento, la industria, las finanzas y el desarrollo corporativo son campos que durante siglos estuvieron, por lo general, en manos de hombres, en su mayoría caucásicos. Sin embargo, ni siquiera este predominio impidió que, ya en el siglo XX, aguerridas mujeres irrumpieran en el mundo empresarial y corporativo. Para ilustrarlo, basta recordar nombres como Meg Whitman, Elizabeth Arden, Alice Walton, Estée Lauder, Diane Hendricks o Martha Stewart.
Según un informe sobre política y economía de la revista Forbes, en Estados Unidos hay más de 14 millones de pequeñas empresas fundadas y gestionadas por mujeres, que representan el 40 % de los negocios del país y generan ingresos por cerca de 2,7 billones de dólares, además de emplear a 12,2 millones de personas.
También, resalta, durante la pandemia, las mujeres cargaron con la mayor parte del peso en los hogares, y se vieron obligadas a cerrar negocios a tasas récord; sin embargo, después de la pandemia se encuentran a la vanguardia del renacimiento económico.
Un reporte reciente del Departamento del Tesoro indica que existen unos 5 millones de negocios propiedad de latinos en todo el país, generando un aproximado de 800 mil millones en ingresos anuales. El informe también señala que entre 2021 y 2023 cerca del 25 % de todas las solicitudes para crear nuevos negocios provinieron de latinos.
De igual modo, mujeres de las minorías escalaron poco a poco y con sacrificio en el ámbito corporativo. Sobresalen los nombres de pioneras negras como Madam C.J. Walker, la primera americana en hacerse millonaria con su propio emprendimiento; Oprah Winfrey, la magnate de los medios y la televisión; Janice Bryant, fundadora del ActOne Group, la mayor compañía nacional gestionada por una mujer negra; o la inmigrante turca Eren Ozmen, dueña de la compañía aeroespacial Sierra Nevada Corp, competencia de Elon Musk.
El último estudio sobre el impacto de las compañías de propiedad femenina en la economía, publicado por Wells Fargo, señala que el crecimiento de los negocios de propiedad de mujeres negras y latinas sobrepasa el promedio general. También indica que durante la pandemia y la postpandemia, las mujeres abrieron negocios a un ritmo mayor del que los cerraron, y que desde 2019 hasta 2023 los nuevos negocios gestionados por mujeres superaron en un 94,3 % a los de hombres, y en un 82,0 % en ingresos. Sin embargo, señala que, en algunos campos, las empresarias, y en especial las negras, enfrentan impedimentos, como el acceso a capital y asistencia técnica, y a ventajas federales, como el acceso a contratos y licitaciones del estado.
Pero a pesar de contar con la triple desventaja de ser mujeres, inmigrantes y latinas –algunas suman una cuarta, la de ser negras o indígenas–, muchas hispanas han dado muestras de su talento y sus habilidades en el desarrollo empresarial, corporativo y también de organizaciones de impacto social.
Entre algunas de ellas están la nicaragüense Marivette Navarrete, fundadora y gerente de The Mujerista; Cristina Junqueira, fundadora del banco Nubank, la aplicación bancaria más extendida en Latinoamérica; la ecuatoriana Nina Vaca, fundadora y gerente del Pinnacle Group, que provee fuerza laboral; la mexicana Yesi Ortiz, cofundadora de LIMA Coalition (Latins in Media & Arts); e Ivelyse Andino, fundadora y gerente del grupo Radical Health.
Además, latinas y afrolatinas también destacan en Filadelfia; nombres como Jenne Chizick Agüero, fundadora y editora de la revista Motivos, María Cristina Ríos, propietaria de la firma Ríos Marketing; Jennifer Hardy, abogada litigante líder del grupo Gomez Law, que atiende casos de daño físico y mala práctica médica, entre muchas otras, de las cuales hemos venido contando sus historias a lo largo de los años en nuestra sección Vidas de Impacto y escrito sobre sus luchas en la sección Mujeres.
En esta edición presentamos parte de la historia de Varsovia Fernández, a quien se le debe mucho por su trabajo enfocado en la prosperidad de los latinos y en general de los menos privilegiados. Su dedicación a través de los años ha impactado a muchas familias de Filadelfia y Pensilvania.
Varsovia es la directora ejecutiva de Pennsylvania CDFI Network, donde sigue siendo una agente de cambio comprometida con aumentar la diversidad en la comunidad empresarial y con ayudar a las empresas a resolver complejos desafíos comerciales y financieros. Desde este espacio, expresamos nuestra profunda admiración por su trabajo y le decimos gracias por su invaluable contribución.