La historia no es predestinación ya que en gran parte consiste en errores que no deben repetirse y crímenes que no deben ser tolerados. La historia es la experiencia de la humanidad. Para lograr entenderla simplemente tenemos que prestarle atención y reflexionar sobre ella. Sus hechos son especialmente necesarios cuando se trata de entender las creencias y los problemas raciales; donde reinan poderosas emociones que alimentan perjuicios y prejuicios
El entender clara y concretamente la historia puede cambiar nuestro juicio sobre el pasado y el presente, especialmente cuando las cuestiones emocionalmente engañosas del presente se ven en el contexto más amplio de la historia de eventos similares en otras regiones del planeta y otras regiones del tiempo. Aunque el pasado puede arrojar una poderosa luz sobre el presente, lo que buscamos sobre el pasado también está influenciado por lo que enfrentamos en el presente. Sin embargo, la historia no cambia el presente. La historia debe tener su propia independencia del presente, ya que el valor y la validez de la historia dependen de su integridad como registro de lo que sucedió, no de lo que deseamos haya sucedido, o de lo que una teoría nos haría creer que debería suceder. Al estudiar la historia de la raza y la cultura, debemos distinguir los patrones confusos e inapreciables en las complejas interacciones históricas y sus limitaciones.
Las diferencias raciales, étnicas y culturales entre las personas juegan un papel importante en los acontecimientos de nuestro tiempo y han desempeñado un papel importante en la larga historia de la raza humana.
Cada pueblo tiene sus propias habilidades para hacer frente a las necesidades económicas y sociales de la vida y su propio valor moral. Los emigrantes como los conquistadores han llevado sus propios patrones de habilidades y comportamiento, en otras palabras, sus culturas; y estos patrones persisten por generaciones o por siglos.
Las ciencias sociales ven al individuo como creación de su medio ambiente o víctima de instituciones sociales, la política, los perjuicios y la genética. Personalmente opino que la cultura tiene más impacto en el desarrollo socioeconómico de las minorías, las naciones y las civilizaciones. La cultura ha formado gran parte de la historia del mundo. Los intentos de lograr a través del multiculturalismo, la acción afirmativa u otras políticas lo que sólo puede lograr la cultura son ilusiones y distracciones que sólo pueden empeorar las cosas. “Los hombres no son libretas en blanco en las que el medio ambiente inscribe una cultura que se puede borrar fácilmente para dar paso a una nueva inscripción”. Oscar Handlin, Historiador… Vamos a hacernos conocedores de la historia para lograr no repetirla.
Entre este Virus que amenaza con tragarnos y los motines desenfrenados, nuestro espíritu no será doblegado y sujeto a la dependencia. Nuestra cultura nos ofrece el antídoto para sobrevivir y poder ver claramente lo que debemos hacer, tanto individualmente como colectivamente. Sí, se puede.