Este 23 de abril se celebrarán las elecciones primarias en Pensilvania, un estado clave en las elecciones presidenciales, cuyos virtuales contendientes, según varios medios, son los de menor agrado y hasta los que mayor número de detractores tienen.
De acuerdo con las votaciones anteriores, Trump comenzará las elecciones generales con 219 votos electorales, en comparación con los 226 votos de Biden, con 93 votos en juego.
En los pasados días, ambos candidatos, Biden y Trump, han viajado a Pensilvania a sabiendas que, aunque tienen la nominación de sus partidos ganada, necesitan seguir conquistando votos. El presidente Biden visitó, en tan solo una semana, tres veces a su estado de nacimiento.
Varias encuestas de principio de año revelaron que Trump superaría en intención de voto a Biden en Arizona, Míchigan, Nevada, Carolina del Norte y Pensilvania, tiene una ventaja dentro del margen de error en Georgia y está técnicamente empatado en Wisconsin.
Una encuesta de New York Times/Siena College, publicada el fin de semana pasado, mostró que el apoyo a Biden había caído 18 puntos entre los votantes negros, 15 puntos entre los latinos y 14 entre los votantes más jóvenes a escala nacional.
Si Trump logra ganar uno o más de los estados de Pensilvania, Míchigan y Wisconsin, el camino de Biden hacia los 270 votos electorales se vuelve aún más retador.
La apatía que provoca el desencanto y el hartazgo por la polarización en la política hace difícil que los ciudadanos, en especial los latinos, salgan a votar en las elecciones presidenciales, y es aún más difícil que voten en las primarias.
Aunque durante las elecciones generales suele haber quejas por la falta de candidatos ideales en las papeletas, las elecciones primarias siguen siendo relegadas a un segundo plano en la agenda cívica del ciudadano común. Este olvido resulta crucial, ya que el voto en las primarias es fundamental para que los candidatos con mayor afinidad a las propias ideas tengan la oportunidad de llegar a las generales.
Si bien Trump y Biden son candidatos con baja popularidad, y es lo que hay para las presidenciales, en las demás contiendas de estas elecciones primarias, sí podrían generar escenarios que favorezcan el escenario político para uno u otro partido en noviembre.
En esta edición presentamos información que pudiera ayudar a definir a quién darle el voto, y enfatizamos la importancia de asumir la responsabilidad civil de apoyar a los más idóneos, capaces, creíbles y comprometidos que se alinean con sus principios.
Este 23 de abril se votará también por el auditor general, el tesorero y el próximo procurador de justicia del Estado. Para el cargo de fiscal general presentamos una entrevista con Jared Solomon, el candidato que tiene familiaridad con los hispanos y latinos. Él dice que sus constituyentes tienen su número de teléfono personal, y ese gobierno cercano a las comunidades es el que quiere llevar a todo el estado.
Ese día se empezarán a despejar algunas incógnitas, y quien participe en las elecciones primarias será parte del pulso de la democracia en Pensilvania, que tendrá un impacto nacional.
Elegir a los representantes de manera responsable requiere un compromiso basado en la información fidedigna. Esto implica dedicar tiempo a leer diferentes medios de comunicación para estar al día con los acontecimientos. También es fundamental escuchar entrevistas, seguir debates e incluso visitar a los funcionarios electos para conocer sus posiciones y trayectoria. Así se pueden tomar decisiones informadas y elegir con criterio a quienes llevarán las riendas de puestos clave en el gobierno de Pensilvania.