Denver (CO), EE.UU.- Ante la negativa del Departamento de Educación de Colorado (CDE) de cancelar debido a la pandemia los exámenes anuales de inglés como segundo idioma, miles de estudiantes latinos que aún no dominan el inglés deberán completar esas pruebas en las escuelas y en persona, incluso compartiendo equipo con otros estudiantes.
Según lo anunciado ayer miércoles por el CDE, unos 95.000 alumnos en las escuelas públicas de Colorado, incluyendo unos 80.000 hispanoparlantes, ya se presentaron o tendrán que presentarse en sus respectivos establecimientos para las pruebas ACCESS, usadas en 36 estados para determinar el nivel de inglés de cada alumno.
En declaraciones preparadas, Katy Anthes, comisionada de CDE, indicó que los padres preocupados por la salud de sus hijos pueden pedir una postergación de los exámenes, pero «no más allá de mediados de marzo». Y confirmó que CDE «no cancelará los exámenes ACCESS este año».
En Colorado, los exámenes ACCESS comenzaron el pasado 7 de enero y concluirán el 12 de marzo, a pesar de que en este estado (como en el resto del país) aún existen numerosas restricciones por la pandemia y cuando los maestros de Colorado aún no han sido vacunados contra la covid-19.
Como el examen ACCESS se divide en cuatro partes, se anticipa que habrá en total unas 120.000 «sesiones en persona» de los estudiantes que necesitan esa prueba para que las escuelas determinen qué clases podrán o deberán tomar esos estudiantes durante el próximo ciclo lectivo.
Algunos dirigentes y padres expresaron su preocupación porque las porciones del examen que requieren leer y escuchar se realizan con varios estudiantes usando el mismo micrófono y auriculares y, para que la grabación sea aceptable, los estudiantes deben retirar sus mascarillas en ese momento.
«Mi familia y yo estamos confundidos. No sabemos qué hacer y no recibimos respuestas claras a nuestras preguntas», dijo a Efe Ernesto Martínez, un ingeniero mexicano que llegó a Denver con su esposa y dos hijos en edad escolar hace poco más de un año, contratado por una empresa petrolera local.
«Quiero que mis hijos aprendan inglés. Están aprendiendo mucho. Pero no quiero que les agarre el virus. No sé por qué los hacen ir a la escuela para una prueba en persona cuando todas las clases se hacen en línea. Nos dicen que no hay peligro por el virus, pero mi esposa y yo tenemos miedo», comentó.
El mes pasado la Asociación de Educación Bilingüe de Colorado (CO-CABE) le había solicitado al CDE que cancelase los exámenes ACCESS de 2021 y que, de no hacerlo, se les informase a los padres que ellos podrían decidir que sus hijos no asistiesen a esos exámenes sin ningún tipo de penalización o sanciones académicas.
Sin embargo, ese pedido fue rechazado por el CDE debido al inicio en diciembre pasado de la vacunación masiva contra el coronavirus, debido a nuevas normas para las escuelas por parte del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) y debido a que entre abril y mayo se llevarán a cabo en Colorado los exámenes académicos estatales.
En ese contexto, dirigentes y voluntarios de CO-CABE intensificaron su trabajo como «enlaces» entre las escuelas y los padres hispanoparlantes para que esos padres conozcan sus derechos en cuanto a los exámenes de inglés de sus hijos.
Y esa organización sigue gestionando la posibilidad de que se les permita a los padres no enviar a sus hijos a esos exámenes.