Berlín, Alemania – La pandemia del coronavirus ha paralizado buena parte del mundo, pero al mismo tiempo ha disparado la creatividad, y el impacto que ha causado en la sociedad se ha convertido en fuente de inspiración para muchos artistas como el grafitero dominicano Eme Freethinker en Berlín.
Explica que la pandemia la está viviendo “casi todo el mundo, como en carne propia», y ya que tenía pendientes un par de trabajos -pintar un restaurante, un café y un bar- pero «todo está paralizado hasta que esto pase», pensó como pasar el tiempo.
Esta situación excepcional «se refleja en toda la sociedad, aunque eso del distanciamiento social ya había empezado hace tiempo con los ‘smartphones’, pero ahora se ve mucho más marcado», afirma.
Es algo que ha tratado de expresar en la mayoría de los muros que ha hecho últimamente, y asegura que «a veces no tiene que ser algo muy político, puede ser algo cómico», aunque sea para «ponerle una sonrisa a la gente».
«El grafiti siempre ha sido un arte contestatario, contundente, y que representa casi siempre lo que está pasando, antisistema sobre todo» y aquí, como en casi la mayor parte del mundo, «el grafiti está sacando lo que piensa».
«No siempre tiene que ser la verdad, pero sí es un reflejo de lo que sienten sus creadores», explica.
Eme Freethinker llegó hace cinco años desde República Dominicana a Alemania, donde vive con su esposa y su hijo; Berlín es su casa desde hace dos años, antes vivió en Friburgo.
En República Dominicana ya pintaba, pero no fue hasta que llegó a Alemania que tuvo acceso a las latas «superprofesionales» para pintar.
«Así que los cinco años que llevo aquí es el tiempo que estoy usando material de verdad», dice, mientras un señor que se ha acercado a hacer fotos le pregunta dónde quedó su maravilloso mural de Frida Kahlo.