Las latinas han hecho grandes aportes a través de la historia, desde encabezar luchas de independencia o derechos humanos hasta sus contribuciones en ciencia, literatura, artes o política, pero poco o nada se sabe de sus hazañas. “Latinitas”, el libro de la ilustradora Juliet Menéndez para niños, les rinde tributo a la vez que educa y espera sirva de inspiración para seguir sus pasos.
Las pequeñas historias se remontan tan lejos como el año 1650 hasta el presente para conocer sobre 40 mujeres en Latinoamérica y EE. UU., que se destacaron en diversos campos. Entre ellas figura Matilde Hidalgo, la primera mujer que se graduó de medicina en Ecuador, la cantante estadounidense Selena Quintanilla, la escritora chilena Isabel Allende, la astrofísica puertorriqueña Wanda Díaz Merced o la joven congresista estadounidense Alexandria Ocasio-Cortez.
La idea de “Latinitas, una celebración de 40 soñadoras” surgió cuando Menéndez, una ilustradora guatemalteca-estadounidense, era maestra en el Alto Manhattan, Nueva York, donde la mayoría de sus estudiantes provenían de República Dominicana, México o Puerto Rico, pero cuando caminaba por los pasillos de la escuela las fotos que veía en sus paredes no se parecían a sus estudiantes.
“Yo veía gente como Benjamin Franklin, Albert Einstein o Dalí. Yo quería poner en las paredes algo con lo que ellos se pudieran identificar”, y así surgió la idea de hacer afiches, recordó la escritora.
Al comenzar a investigar la historia de los latinos para los afiches se percató de que no había mujeres, “lo que sacó la feminista que hay en mí”. “Cuando vi que las historias eran tan interesantes, que había desde científicas, artistas, cantantes, políticas, me dije: ‘Estas historias no solo pueden ser afiches porque no se conocen estas mujeres realmente’”, y así nació la idea del libro, indicó.
Menéndez muestra con sus historias una gran variedad de campos en los que sobresalieron estas latinas tanto en sus países de origen como en EE. UU., así como sus diversos orígenes étnicos.
MUJERES COMO NIÑAS
Algo que atrae en el libro, que se publicó en inglés y que en los próximos meses estará disponible en español, es que la autora ilustra a estas mujeres como niñas; por eso el título “Latinitas”. “Las presenté como niñas porque me llamó mucho la atención que los lectores, especialmente los niños, podían identificarse con los personajes, que no eran algo inalcanzable. Quería que vieran que las ideas empezaban con pasos pequeños”, dijo.
Cada historia contiene una anécdota importante en sus vidas que las motivó a perseguir sus sueños y convertirse en los personajes que fueron o son, porque muchas están vivas. Así, la salvadoreña Antonia Navarro demostró que no era cierto lo que decían los profesores de sus hermanos —“las niñas no son lo suficientemente inteligentes para hacer matemáticas”— y se convirtió en ingeniera topográfica y primera mujer de toda Centroamérica en graduarse de la universidad.
También la novohispana Sor Juana Inés de la Cruz, que se convirtió en una gran poeta aprendiendo por ella misma todo lo que podía luego de que a los siete años le dijeran que a las niñas no se les permitía ir a la escuela, o la argentina Susana Torre, que construía nidos de pájaros con su prima cuando era niña y se convirtió en arquitecta y fue la primera mujer en diseñar un edificio público en Indiana (EE.UU.).
Escribir llevó también a Menéndez a tener la experiencia de conocer a dos de sus heroínas: Torre y la ganadora del Premio Nobel de la Paz 1992, la guatemalteca Rigoberta Menchú Tum, quienes aportaron a sus historias.
Otras mujeres en este libro son la bailarina cubana Alicia Alonso, la jueza del Tribunal Supremo estadounidense Sonia Sotomayor, la gimnasta Laura Hernández, las activistas Berta Cáceres y Dolores Huertas, o la dominicana Solange Pierre, que demandó al Gobierno para lograr que se reconocieran los derechos humanos de los dominicanos de origen haitiano.
Menéndez espera que el libro ayude a un mejor entendimiento de la cultura latina y lo mucho que han contribuido las mujeres con su talento, y que inspire a los niños a escribir las próximas páginas de la historia.