Filadelfia. — Rob Thomson levantó una botella de champaña para brindar en el clubhouse después que los Filis se convirtieron en el último equipo en avanzar a la postemporada. El mánager de los Filis intentó darle un trago y nada salió. El corcho seguía dentro.
Dos desenfrenadas fiestas de postemporada más tarde, Thomson ha perfeccionado el arte de quitar el corcho de la botella cuando dirige a los Filis a buscar el boleto a su primera Serie Mundial desde 2008.
“¿Cuántos triunfos más?”, preguntó luego que los Filis ganaron la Serie Divisional de la Liga Nacional en cuatro encuentros.
“Tenemos ocho más Topper”, gritó el receptor J.T. Realmuto refiriéndose a Thomson por su apodo.
Así comenzaron a celebrar mientras se escuchaba el himno de las fiestas en la postemporada, “Dancing on My Own”.
Primero, los Filis eliminaron a los Cardenales de San Luis, que terminaron con 93 triunfos como campeones de la División Central, y después superaron por 17-4 en dos encuentros como locales a los Bravos de Atlanta para mandar a casa a los campeones defensores.
A continuación, los dos primeros partidos de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional ante los Padres de San Diego, que terminaron con 89 victorias. Los Filis ganaron sólo 87, pero ya no importa. No desde que Rhys Hoskins conectó un jonrón enorme o que Realmuto se convirtió en el primer receptor en la historia de la postemporada que batea un jonrón dentro del parque. O que Aaron Nola tuvo grandes actuaciones como as. Bryce Harper hizo creer a los Filis con tres cuadrangulares y terminó de 16-8 al bate en cuatro duelos ante los Bravos.
Los Filis lo hicieron todo en los juegos 3 y 4, mientras que los aficionados de los Filis abarrotaron el Citizen Bank Park.
“Trabajan duro por todo lo que tienen”, dijo Harper sobre los aficionados. “Me dan escalofríos porque me emociona. Me hace querer ganar más”.
Los Filis iniciaron la postemporada 5-1 por primera vez en la historia de la franquicia y es la primera vez que han ganado cinco de seis en un lapso en los playoffs desde el 2009.
Los Filis pasaron una década en el purgatorio y parecía que seguirían ahí unos años más hasta que el dueño John Middleton convenció a Harper que dejó a Washington en el 2019 y firmó como agente libre por 13 años y 330 millones de dólares. Canjearon para recibir a Realmuto en el 2019 y firmaron al campeón de jonrones de la Liga Nacional Kyle Schwarber ya Nick Castellanos como agentes libres esta campaña.
Y después lograron canjes en el límite de cambios para adquirir al abridor del juego 4 Noah Syndergaard y al jardinero Brandon Marsh.