RAYÁN, Qatar.— Yassine Bounou y Achraf Hakimi hicieron historia con Marruecos, que mantiene vivo su sueño mundialista tras deshacerse de España, una de las favoritas al título, en una definición de penales.
Marruecos avanzó el martes a los cuartos de final de una Copa del Mundo por primera vez al vencer a España por 3-0 desde el punto de penal luego de empatar sin goles. El partido acabó 0-0 tras 120 minutos.
Hakimi quedará en la historia como autor del penal más importante de su país y del fútbol árabe, que nunca había llegado tan lejos en el máximo torneo de selecciones. A su lado estará el nombre de Bounou, excepcional bajo los palos tras atajar dos penales y mantener su puerta en blanco ante de uno de los equipos con más goles a favor del torneo.
Abdelhamid Sabiri y Hakim Ziyech también marcaron por Marruecos.
Pablo Sarabia, Carlos Soler y Sergio Busquets fallaron sus penales para España, con Sarabia estrellando el suyo contra el poste y Bounou tapando los otros dos.
“Yo no creo en las casualidades, han estado mejor que nosotros en la tanda de penaltis y estamos eliminados”, dijo el arquero español Unai Simón.
Marruecos quedó como la única selección no europea o sudamericana entre las ocho mejores en Qatar y la primera africana en cuartos de un Mundial desde Ghana en 2010.
Walid Regragui consumó su increíble historia al frente de la selección marroquí, de la que asumió las riendas finales de agosto. Recuperó a Ziyech, el delantero del Chelsea inglés que regresó tras más de un año de ausencia de la mano del nuevo técnico.
El tanto de Hakimi, el lateral del Paris Saint-Germain que nació en España y despuntó en el Real Madrid, desató las celebraciones entre la marea de aficionados marroquíes en el estadio Education City.
Por su parte, los españoles se desplomaban en el círculo central despidiéndose del sueño de conquistar su segundo título, para el que habían presentado sus credenciales con una abrumadora goleada ante Costa Rica.
En el lado español, Sarabia abrió la cuenta estrellando el balón al palo izquierdo del meta del Sevilla. Simón dio alas a las esperanzas españolas al atajar el lanzamiento de Badr Benoun, el tercero de los marroquíes, pero Soler y Sergio Busquets se toparon el guante de Bounou.
En un partido de ida y vuelta, con momentos tanto para el juego de pases marca de la casa de los hombres de Luis Enrique como para los arreones marroquíes, ambos tuvieron oportunidades para inclinar la balanza a su favor durante el trámite reglamentario.
España arrancó la segunda mitad ansioso por zanjar el encuentro pero no pudo encontrar huecos en el muro marroquí, cuyos contragolpes no llegaron a buen puerto. Con el marcador todavía intacto y ambos equipos volcados para evitar la prolongación, llegaron algunas de las mejores ocasiones.
Álvaro Morata, máximo goleador de la Roja en Qatar con tres tantos, avisó con un disparo esquinado desde la derecha que se paseó por delante de la meta de Bounou. Walid Cheddira le dio la réplica poco después con un remate a la media vuelta en el área que acabó en los guantes de Simón.
Nico Williams y Morata tuvieron las ocasiones más claras al inicio de la prórroga, y Cheddira volvió a rozar el gol a los 104 minutos, pero su disparo salió desviado tras la intervención de Simón. La última antes del pitazo final que daría paso a los penales fue para Sarabia, quien acababa de entrar en la cancha, y no acertó con un tiro que se marchó rozando el palo.
La batalla en las abarrotadas gradas del estadio fue muy diferente. En un mar de camisetas rojas, el color que identifica a los dos vecinos mediterráneos, la hinchada de los norteafricanos ganó por goleada: puso la banda sonora del duelo, con una pitada constante a cualquier movimiento español y vítores cuando la pelota llegaba a las botas de los suyos.
Fue el segundo partido de este Mundial que se decidió por penales, con Croacia imponiéndose ante Japón el lunes en octavos. España no aprovechó su reciente experiencia en estas situaciones — con dos tandas decisivas en la Euro del año pasado — y se despide de Qatar en la misma ronda que hace cuatro años, cuando también se despidió en octavos tras caer en los penales con la anfitriona, Rusia.
Busquets, que a sus 35 años es el único sobreviviente del equipo campeón del mundo en 2010 y el futbolista de más edad en una de las selecciones más jóvenes del torneo, igualó al arquero Iker Casillas y al lateral derecho Sergio Ramos como los españoles con más partidos disputados con la camiseta de España.
“Hemos hecho méritos para seguir», dijo Busquets. «Nos vamos de la manera más cruel…. Fallando tres penaltis es muy difícil”.
Los marroquíes han sido una de las revelaciones al acabar primero en un complicado grupo con Croacia, actual subcampeona, y Bélgica para igualar su mejor resultado histórico, la fase de octavos en México 1986. Alcanzan la instancia de cuartos en su sexto Mundial.
Marruecos se medirá en la siguiente ronda al ganador del choque entre Portugal y Suiza que se disputaba más tarde en el día.