Pittsburgh, PA- El 5 de agosto el mundo deportivo se despertó con una noticia inesperada, Messi, el mejor jugador del mundo no continuaría en el Barcelona, fue un golpe para todos, no solo lo que significaba el astro argentino para el club catalán, sino para La Liga, que ya habían dejado ir, solo hace algunos años a Cristiano Ronaldo, y ahora, ¡La Pulga dejaba de ser culé!
Que golpe, para muchos catastrófico, tanto para el futbol español, como para los catalanes, pero también para las firmas patrocinadoras del Barcelona, que se agarraban la cabeza y decían ¿Y ahora qué?
Pero vamos por partes, por que estoy hay que desmenuzarlo y ser francos y no culpar a nadie de esto exclusivamente, porque debemos de ser justos y ecuánimes, no culpar, como muchos lo han hecho a Messi, por no quedarse a jugar gratis, cosa que es ridícula, pues hay cuestiones de contracto con su agente, tampoco culpar al equipo, ellos tienen que cumplir con las leyes del país, en tema de contratación de jugadores y por último a La Liga, y ahí si tengo algo que decir.
Primero que todo, recordemos que la novela Messi comenzó el año pasado, no se sabía si Messi seguiría en el Barcelona y eso terminó con la salida de José María Bartomeu del club catalán, cuando precisamente el capitán del Barcelona dijo que si seguía Bartomeu él se iba. Bartomeu renunció, Laporta ganó las elecciones, y lo primero que hizo fue hablar con el crack argentino y pedir que no se fuera.
Entonces los patrocinadores que amenazaban con irse si Messi no seguía, firmaron nuevos contratos como lo hizo Rakuten, la firma japonesa acordó un año más por 250 millones de euros, por otro lado, está la gran deuda del club, en el 2020 llegaba a 1.2 billones de euros. Laporta volvió a reunirse con acreedores y llegaron a acuerdos de pago, también condicionados a la permanencia de Leo.
Pero el mismo equipo, empresario y jugador no quedaron claros en el salario, y ahí estuvo todo el desajuste. El club necesitaba aumentar su presupuesto para el pago de jugadores, y salir de jugadores, pero no se pudieron vender Umtiti y Coutinho, así que eso complicó el aumento del presupuesto disponible.
Messi se bajó su salario, según habían acordado con el club, según reportes de prensa española, el capitán de la selección argentina ganaría $165 millones de dólares y se quedaría en el club hasta el 2026, por eso Leo estuvo de vacaciones y llegaría a firmar su contrato, pero todo se cayó.
El Barcelona rechazó la inyección de dinero que le enviaba La Liga, precisamente Jorge Tebas había anunciado el acuerdo con CVC Capital Partners, esta negociación les inyectaba 2.7 Billones de euros a La Liga, de ellos 90% se iría a repartir a los clubes, y aunque solo una parte el 15% se podría usar para salarios esto iba a ayudar a ampliar los topes salariales.
Ahora sin embargo, el futuro de la pulga en Paris se ve muy iluminado, en el club con un objetivo claro con el técnico argentino Mauricio Poccetino, que armó el equipo que quería con el apoyo financiero del dueño, el catarí Nasser Al-Khelaifi. El equipo competirá en serio en la Champions League, con Neymar, Mbappe, Di María, Donnarumma, y Paredes entre otros.
Con todo esto lo único que podemos pedirle a Messi es que se siga divirtiendo con la pelota, que siga deslumbrándonos desde la ciudad luz dándole mas intensidad a la Torre Eiffel y no nos deje sin su futbol, por que el sigue siendo el mejor del mundo y que los fanáticos del PSG lo valoren y lo disfruten ahora en Le Parc des Princes Stadium. ¡Buena suerte Pulga! ¡O en francés Bonne chance Messi!
Y la próxima semana otras noticias del deporte más hermoso del mundo. ¡El futbol!