El actor de Broadway Nick Cordero murió El 5 de julio por complicaciones derivadas del coronavirus, tras pasar más de tres meses hospitalizado en Los Ángeles.
«Mi querido esposo falleció esta mañana. Su familia lo rodeó de amor, cantando y rezando mientras salía gentilmente de esta tierra«, escribió su mujer, Amanda Kloots, en redes sociales apenas días después de anunciar que el actor había dado negativo a la prueba del COVID-19 pero con graves secuelas. El tratamiento de Cordero, de 41 años y nominado al premio Tony, ha sido muy seguido en Estados Unidos ya que era una figura reconocida en el circuito de Broadway y no tenía problemas médicos previos, según su familia. Su esposa detalló en una entrevista ue el actor habría necesitado un trasplante doble de pulmón para recuperarse de la enfermedad, por la que llegó a estar en coma y se le tuvo que amputar una pierna. Según su testimonio, la enfermedad fue tan fuerte que los médicos llegaron a temer por su vida en cuatro ocasiones anteriores.
Su esposa Kloots afirmó que desconocen cómo se contagió de la enfermedad.
«Supimos que debido a la COVID-19 los pulmones de Nick están severamente dañados. Parecía que como si hubiera sido fumador durante 50 años«, añadió.
Cordero era padre de un hijo de un año, llamado Elvis.
«Era amigo de todos, le encantaba escuchar, ayudar y especialmente hablar. Fue un actor y músico increíble. Te amaré por siempre«, publicó su esposa.
Cordero nació en Canadá y llegó a Nueva York (EE. UU.) para trabajar con actor teatral.
En 2014 fue nominado al premio Tony -los Óscar del teatro- por su papel en «Bullets Over Broadway», por el que ganó también un Theatre World Award y oun Outer Critics Circle Award.
“Rock of Ages”, “Waitress” y «A Bronx Tale: The Musical» son otros de los espectáculos en los que participó.
En la pequeña pantalla actuó en producciones como «Law & Order: Special Victims Unit» y «Blue Bloods».