Nueva York, (EFE News). – Melissa Lucio fue la primera mujer hispana en ser condenada a muerte en el estado de Texas, en Estados Unidos, aunque fue después de un juicio plagado de irregularidades, según desvela un documental presentado en el Festival de Cine de Tribeca, que expone la vulnerabilidad de los más pobres, y en especial de la comunidad latina, ante el sistema judicial estadounidense.
«Casi no cubrí su caso, porque no había información sobre ella. No había nada en la prensa, nada en los medios, nada en YouTube», cuenta en una entrevista con Efe la directora de «The State of Texas vs Melissa», Sabrina van Tassel, sobre la invisibilidad de Lucio, condenada en 2008 a morir por haber matado supuestamente a su hija de 2 años.
En la más de hora y media que se extiende el documental, que pese a presentarse en la versión «online» de Tribeca de este año no compite por un premio, se desgranan todas las anomalías del caso de Melissa, empezando con las imágenes de una mujer a todas luces confundida y agotada, casi en estado catatónico, confesando durante un interrogatorio policial haber pegado a la menor de sus 14 hijos y ser «responsable» de su muerte.
Melissa se retractó más tarde de aquello que dijo a las 3.00 de la madrugada, después de horas sin comer, beber, dormir ni ir al baño, y que contradice radicalmente los testimonios de todos los que conocen a Lucio, que la describen como una mujer tímida, reservada, bondadosa y jamás violenta con sus hijos.
«No hay ningún tipo de prueba. Hay una mujer en el corredor de la muerte y no hay ni una sola persona que la haya visto pegar a su hija. Lo único que tienen es lo que llaman una confesión», arguye Van Tassel, que ha trabajado en el documental durante 3 años tratando de esclarecer por qué se le declaró culpable, y por qué se le dio la pena máxima.
Entre la larga lista de razones, el abogado de defensa de oficio que se le adjudicó, Peter Gilman, que no solo no habló con un solo miembro de la familia o conocido de la acusada para entender ni su carácter dócil ni los traumas que arrastraba después de una infancia de abusos, sino que ocultó confesiones de que otra hija de Melissa empujó por unas empinadas escaleras a la pequeña fallecida.
«Hay un problema enorme entre los ricos y los pobres en EE.UU. en cuanto al sistema judicial se refiere. No sé ni cómo se puede continuar en un país con este tipo de justicia. Se demuestra que hay gente inocente (en la cárcel) todos los meses, en todos los sitios», agregó la cineasta y periodista.
En concreto, señaló que además de su escaso interés, Gilman contaba con solo 100.000 dólares para enfrentarse a un juicio de pena de muerte y contratar a una larga lista de expertos, mientras que la Fiscalía del distrito de condado de Cameron, en el sur de Texas, disponía de millones de dólares.
Así, subraya, las posibilidades de que personas de las comunidades más humildes, como las afroamericanas o las hispanas, acaben en la cárcel, y con una condena de muerte, son «mucho mayores», y opina que «el mayor racismo que existe en EE.UU. es entre los ricos y los pobres».
Además, los latinos son especialmente vulnerables, por la falta de una red social que les proteja en caso de ser objeto de injusticias.
«No hay tantas organizaciones como en las comunidades afroamericanas, ¿sabes? Ellos están muy unidos y tienen más apoyos, pero en la comunidad latina no es así», agrega.
Pese al documental, con el que Van Tassel ha querido atraer precisamente el apoyo que tienen otros casos de pena de muerte dudosos, la directora no se siente optimista ante la posibilidad de que Lucio esquive la pena de muerte aun con todas las apelaciones y las pruebas que se han presentado.
«No soy muy optimista francamente (…) A decir verdad, tengo miedo y realmente espero que esta película y la atención de los medios, especialmente de la comunidad latina, se aumente», señaló Van Tassel, que dijo que, pese a que la condena ha sido anulada en 2019 por un tribunal de apelaciones, el carácter conservador de los jueces de otro tribunal que tienen que ratificarlo le hacen dudar de un resultado victorioso.
«Podría tener una fecha para su ejecución muy, muy pronto. Quizás en el próximo año», advirtió.