Nueva York, EE.UU.– La Fiscalía general de Massachusetts se unió a una coalición de 23 fiscales en el país que sometieron comentarios al Departamento de Salud y Servicios Humanos en apoyo a la intención de la Administración del presidente Joe Biden de restaurar el programa Título X, de acceso a servicios de atención médica a mujeres de bajos ingresos.
Según la ley actual, impuesta por el pasado Gobierno de Donald Trump en 2019, la financiación federal para el aborto está prohibida en la mayoría de las situaciones.
El pasado enero, Biden firmó un memorándum para revertir las restricciones al Título X, que proporciona millones de dólares en fondos para diversos servicios.
«La regla de mordaza dañina de Trump negó el acceso a servicios de atención médica críticos para personas de bajos ingresos, afroamericanos y LGBTQ+, comunidades de todo el país», indicó en un comunicado la fiscal de Massachusetts, Maura Healey.
«Estamos encantados de que la Administración Biden haya actuado rápidamente para restaurar el programa del Título X, vital y exitoso».
En la carta enviada al secretario del Departamento de Salud, Xavier Becerra, Massachusetts señala que la regla impuesta por el Gobierno de Trump «socavó la salud pública de la población a la que se destina el programa», y expresa su apoyo al esfuerzo de la agencia que dirige de restaurar el programa.
«Como fiscales generales tenemos el deber de proteger a nuestros residentes y salvaguardar su salud y seguridad», agrega en la carta, dada a conocer este martes.
La propuesta del Gobierno regresaría el Título X a su estado antes de que Trump asumiera la Presidencia en 2017.
Bajo las reglas del Gobierno Trump, se prohibía a cualquier proveedor de salud brindar atención o remitir pacientes para abortos si recibían fondos federales a través del Título X para cubrir servicios como anticoncepción y pruebas de detección de enfermedades de transmisión sexual para personas de bajos ingresos.
Healey recordó que antes de la Administración Trump, Massachusetts recibía más de cuatro millones de dólares anuales en fondos bajo ese programa, que permitió a más de 90 sitios ofrecer una amplia gama de servicios que incluyen pruebas de embarazo, servicios anticonceptivos o atención ginecológica de rutina.
También de anemia, diabetes, exámenes de detección de cáncer de cuello uterino y de mama, tratamientos contra enfermedades de transmisión sexual, y educación sanitaria.
Indicó además que los servicios proporcionados a través del programa federal ayudaron a evitar miles de embarazos no deseados en el estado cada año.
El Título X le ahorró al Gobierno estatal y federal un estimado de 150 millones de dólares al año.