Ginebra – La Organización Mundial de la Salud dice que la leche de las madres es lo mejor para los bebitos y eso incluye a las mujeres infectadas con el nuevo coronavirus.
En la Semana Mundial de Lactancia Materna que se celebró del 1 al 7 de agosto, las agencias de salud alentaron a las mujeres a amamantar a sus hijos para un planeta más saludable. A los defensores de la lactancia materna les preocupa que los servicios de apoyo para las nuevas madres se están interrumpiendo debido a la pandemia de coronavirus. Alegan que las reglas de distanciamiento social dificultan a las madres recibir apoyo y motivación para amamantar a sus bebitos. Lawrence Grummer-Strawn, director de una unidad de la OMS encargada de los sistemas de alimentos, nutrición y atención de la salud dijo que esa entidad y el Fondo para la Infancia de la ONU están pidiendo mayores inversiones para asegurar que las mujeres amamanten a sus bebitos.
“Esto es particularmente importantes en estos momentos porque hemos documentado a través de modelos que alrededor de 820.000 vidas infantiles se pierden anualmente debido a la falta de leche materna”, señaló.
Las agencias de salud dicen que la lactancia materna protege a los niños de la diarrea, la principal causa de muerte en los países de bajos ingresos. También protege a los bebitos de infecciones respiratorias, leucemia y obesidad infantil. A las madres las resguarda de cánceres de pecho y ovarios de diabetes tipo 2.
Grummer-Strawn dijo a la Voz de América que las mujeres enfermas de COVID-19 no deben temer de amamantar a sus hijos recién nacidos. No hay peligro para los bebitos. Añadió que las madres que amamantan a sus hijos solamente por seis meses les dan el mejor el mejor impulso en el inicio de sus vidas. “La razón es que los riesgos de transmisión de la COVID-19 de una madre positiva a su bebito son extremadamente bajos”, explicó.
“No hemos documentado hasta ahora en ninguna parte del mundo una transmisión por medio de la leche de pecho. Eso no implica que pudiera ser posible, pero sería extremadamente raro”.
Grummer-Strawn dijo que la OMS está muy preocupada sobre lo que describió como prácticas engañosas de la industria de fórmula para bebitos. Las compañías sobornan a los trabajadores de la salud para estimular a las mujeres a alimentar a sus hijos con botellas y les suministran muestras gratis a las madres para que sigan usando sus productos.
En el contexto de la COVID-19, añadió, muchas compañías se presentan como expertos que pueden ofrecer consejos y apoyo a las madres en estos tiempos difíciles.
También dijo que los médicos que aparecen en sus sitios web hablando sobre el cuidado de los bebitos durante la pandemia hacen sugerencias con mensajes negativos sobre la lactancia materna.