El consulado mexicano en Nueva York inauguró hoy la exposición itinerante «Corazón Migrante» que muestra el trabajo de 23 artistas de origen mexicano residentes en Estados Unidos y que tras visitar varios estados concluirá en noviembre en Los Pinos, residencia oficial del presidente de ese país.
«Corazón Migrante», convocada por el Instituto Mexicano en el Exterior y compuesta por 40 pinturas y dos esculturas, ha visitado ya 12 consulados y estará en Nueva York tres semanas antes de partir hacia la ciudad de Raleigh en Carolina del Norte y luego a Atlanta, explicó a EFE Maricruz Sibaja, coordinadora de la exposición y una de los 23 artistas del colectivo.
Indicó que la idea es promover el arte como elemento de unidad entre la comunidad mexicana. «Es muy difícil hacerlo sin esa unidad», afirmó..
«El propósito es llevarla donde más podamos porque estamos trabajando para nuestras comunidades, para que los jóvenes vean que esto es también es un trabajo, una profesión y que a través del arte, de la pintura, podemos expresar lo que queremos decir», agregó Sibaja, que nació en Oaxaca y que exhibe su obra «Azul Cielo» en la que la Catrina (representación de la muerte) abraza un xoloitzcuintle, una peculiar raza de perro mexicano sin pelo.
Recordó que los mayas creían que estos perros guiaban al que murió hasta para el lugar donde van los muertos. «Por eso está con la Catrina, es un autoretrato» dijo y agregó que las flores que rodean a la Catrina son las que bordan en los vestidos de las mujeres de su natal Istmo de Tehuantepec, una región entre los estados de Oaxaca y Veracruz.
«Hay gente que aprende leyendo, otros escuchando y otros visualizando. El arte es para aprender a través de la visualización y es una forma de expresión en la que podemos decir todo lo querramos», un mensaje que continúa presente hasta después de la muerte, indicó la artista.
Destacó que «Corazón Migrante», que está lleno de colores vibrantes, habla de las tradiciones de México. y que muchos de los artistas llevan años dedicados a su arte.
«Corazón Migrante» se muestra en la sala Octavio Paz del Consulado mexicano en Manhattan.
El cónsul Jorge Islas López dijo a EFE que aunque no es el primer consulado «es uno de los más representativos» dado que Nueva York «es una ventana al mundo cultural» y destacó que «estamos viendo la expresión de nuestra gente que ya forma parte de una cultura binacional. Son de México sí, pero también son de aquí».
Destacó además que esta exposición marca la reapertura de la galería Octavio Paz, que permanecía cerrada por respeto a los mexicanos que murieron durante la pandemia de la covid en Nueva York.
«Esta sala hubo cerca de 450 urnas de mexicanos que fallecieron por la covid. En este lugar habían mesas aglutinadas con las urnas de sus cenizas. No la habíamos abierto por luto, por dolor, por decisiones sanitarias pero qué mejor manera de volverla a abrir con el arte de nuestra gente», afirmó.