WASHINGTON D.C. – El secretario de Justicia de Estados Unidos, William Barr, dijo el jueves que en los últimos meses, probablemente impulsado por el encierro causado por la pandemia del coronavirus, se ha reportado un incremento en casos de consumo de anfetaminas y metanfetaminas, drogas que catalogó como extremadamente peligrosas.
Si bien Barr dijo que el Departamento de Justicia en conjunto con la policía y la Administración de Control de Drogas (o DEA por su siglas en inglés) han logrado una disminución sustancial en el combate al crimen en el país, el tráfico y consumo de drogas, específicamente de las metanfetaminas, está causando que muchas personas se vean afectadas y sufran las consecuencias del uso de las mismas.
“Desafortunadamente, este año, quizás esté asociado con el COVID de alguna manera, pero hemos visto un aumento en las sobredosis de opioides y parte de esto ha sido impulsado por un cambio al fentanilo, una droga muy mortal”, señaló Barr en una conferencia de prensa.
“La metanfetamina es una droga muy peligrosa y mortal y hace estragos en el cuerpo, creo que todos hemos visto fotos del antes y el después (de su uso), los dientes se caen, se forman costras en la cara, los adictos parecen zombis, y destruye la salud de la persona, destruye la mente, la capacidad de las personas para controlar sus impulsos, la ira, rabia y agresión que con frecuencia conduce a la violencia”, agregó el secretario de Justicia.
Barr dijo que, según investigaciones del Departamento bajo su dirección, gran parte de esta droga proviene de China y es transportada por los carteles en México hacia territorio estadounidense.
“Anteriormente, la metanfetamina se fabricaba en gran parte en Estados Unidos, se cocinaba en el país en pequeña escala, ahora es fabricada a escala industrial por los dos principales cárteles de México, y viene desde el otro lado de la frontera a través de una red de distribución”, explicó el funcionario.
Según Barr, en 2019, los casos registrados de sobredosis de esta droga fueron de 16.00, un aumento sustancial en comparación con los 12.000 registrados en 2018.
El funcionario agregó que el Departamento de Justicia está trabajando en conjunto con las autoridades mexicanas para poder atacar a los carteles y a los capos, a quienes buscan también extraditar en cuanto sean capturados por las autoridades.
“Hemos seguido trabajando en conjunto con los mexicanos para detener a más líderes del cartel para su extradición. También comenzamos a incrementar nuestras operaciones coordinadas contra el cartel con un plan bastante sólido para trabajar con los mexicanos en la destrucción de los laboratorios de metanfetamina, desafortunadamente el COVID ha intervenido”, dijo en referencia a que muchos operativos se han detenido debido a la pandemia.
Barr finalizó diciendo que espera que tan pronto los riesgos de la pandemia se reduzcan, continuarán atacando el problema junto a las autoridades mexicanas.
«Estamos seguros de que a medida que el COVID pase vamos a volver a encarrilarnos con México y tener mucho éxito», zanjó el secretario de Justicia estadounidense.