Miami, EE.UU.- Una organización republicana lanzó una campaña de vallas en todo el país en la que insta a renunciar a 11 congresistas de Estados Unidos por «mentir» al señalar que hubo fraude electoral y por su «responsabilidad» en el asalto a Capitolio en Washington el pasado 6 de enero perpetrado por trumpistas.
En Florida los avisos piden la renuncia del congresista Matt Gaetz, aliado incondicional del expresidente Donald Trump, que enfrenta un juicio político acusado de incitar a sus seguidores a tomarse el Capitolio argumentando sin pruebas fraude en las elecciones en las que fue derrotado por el demócrata Joe Biden.
«Usted mintió sobre la elección. El Capitolio fue atacado. Representante Gaetz: Renuncie», dicen las vallas, con una foto del republicano, que se han visto en varios lugares del noroeste de Florida, donde está el distrito que representa.
Vallas similares se fueron instaladas por el Proyecto de Responsabilidad Republicana por todo el país, como unas en Texas con el senador cubanoestadounidense Ted Cruz y otras en Georgia con la polémica congresista Marjorie Taylor Greene, que se ha adherido abiertamente al movimiento conspiratorio QAnon.
Este comité de acción política (PAC) se propuso invertir un millón de dólares en una campaña en la que llama a 11 republicanos a renunciar tras sus acciones desde las elecciones de noviembre pasado, en las que ganó Biden.
La campaña del Republican Accountability Project urge la renuncia de 11 republicanos «por su papel en el ataque al Capitolio del 6 de enero».
La vallas «están dirigidas a los legisladores republicanos que fueron los más irresponsables durante las secuelas de las elecciones», señala la PAC en su página de internet.
Gaetz, que es abogado, incluso ha mostrado interés en renunciar a su escaño para defender al expresidente Trump en el juicio político, a lo que el Partido Demócrata de Florida le respondió este viernes que lo haga.
Según la PAC republicana, la toma del Capitolio por partidarios «radicales de Trump» intentó «anular una elección justa».
«Los atacantes fueron incitados directamente por Trump y la abrumadora mayoría de los republicanos en el Congreso que habían estado afirmando falsamente, durante meses, y en los momentos inmediatos antes del ataque, que las elecciones le habían sido robadas a Trump», agrega.
Señaló que el ataque, en el que murieron 5 personas, entre ellos un policía, fue un asalto a la democracia que «erosiona la fe de los estadounidenses en la integridad de nuestro sistema electoral».