El chef mexicano Aarón Sánchez cree que es hora de que más latinos salgan de atrás de los restaurantes de Estados Unidos y sean dueños de negocios con el «sabor familiar» que caracteriza a esta comunidad, según dijo en entrevista con EFE.
«Los restaurantes en Estados Unidos no funcionan sin nosotros los latinos», opina Sánchez, de 47 años, quien acaba de estrenar su nuevo programa «El Toque de Aarón».
Nacido en Chihuahua (México) y con más de 30 años de experiencia, Sánchez ha logrado hacerse de un lugar privilegiado al convertirse en una celebridad como chef, autor de libros de cocina y filántropo.
Considera que «ya es hora de que los latinos que han trabajado para otras persona ocupen el lugar que merecen y tengan éxito».
Por eso en los últimos años se ha enfocado en impulsar a más latinos a ser dueños de sus restaurantes y sacar adelante sus negocios, una de las razones que inspiró el nuevo programa de televisión.
Dueño del restaurante Johnny Sánchez en Nueva Orleans, el chef sabe que el reto de sacar adelante un restaurante en EE.UU. «no es fácil» por lo que propone a los nuevos emprendedores apoyarse «en mentores».
«Siempre se está en constante aprendizaje, siempre alguien te enseña algo», comenta.
La lección la aprendió desde niño al lado de su mamá, Zarela Martínez, pieza fundamental para dar a conocer en EE.UU. la auténtica comida mexicana a través de sus restaurantes, sus libros y los festivales gastronómicos de comida mexicana que impulsó desde la década de los ochenta.
En 1987, Martínez abrió «Zarela» en Nueva York, un ejemplo que replicó Sánchez en 1999 cuando apenas tenía 23 años y abrió su primer restaurante, «Paladar», también en la Gran Manzana.
«Lo abrí con muy poco dinero y sufrimos bastante para levantarlo», recuerda. Para esa época ya tenía más de cinco años de experiencia en otras cocinas diferentes a Zarela en las que aprendió que en los negocios «necesitas de mentores».
«Me ayudó mucho a expandir mi negoció», recuerda. Con el tiempo también comenzó a ser mentor y se quiso enfocar en su propia gente.
Como emprendedor entiende los desafíos que conlleva administrar un negocio por eso ha dedicado su nuevo proyecto «El toque de Aarón» a ayudar a pequeños negocios de latinos a sobresalir.
Para la primera temporada escogió seis pequeños restaurantes latinos de Los Ángeles: Ceviche Stop, Café Fresco, Yuca’s, Nonnas, Rey del Mar y Chamo.
Su idea es traer «una chispa nueva» a los negocios. Cuenta que encontró grandes ideas y mucha pasión por el trabajo apoyado por la familia.
No obstante, señala que esta pasión no es suficiente para hacer de un restaurante un negocio exitoso. «A veces no hay experiencia en la familia de cómo manejar un negocio, y ponemos a nuestra hermana, nuestros padres, nuestras tías en labores en las que ellos no tienen conocimiento. No sólo se puede depender de la buena cocina», subraya.
Explica que en un restaurante, como en todo negocio, hay que estar pendientes de los costos, del manejo de equipos, de cómo aumentar la eficiencia, del manejo de clientes y la publicidad, entre otros factores.
Por eso su misión ahora es impulsar a los negocios latinos a crecer. «No quise cambiar la esencia de estos restaurantes, lo que pretendo es llegar con mi equipo y dar un empujón para que sean exitosos».
En este trabajo le ayuda la diseñadora Cris Mercado y el gerente de proyectos, Ángel Riveros, que hacen parte del equipo. «Nos han confiado el sueños de sus vidas en nuestras manos, eso es fuertísimo».
Por eso invita a todos los latinos a seguir el ejemplo de este proceso. «Creo que podemos aprender mucho de estas transformaciones para aplicarlo en nuestros propios negocios», puntualiza.
«El toque de Aarón», una apuesta en español para la televisión en EE. UU., es producido por Warner Bros Discovery U.S. Hispanic, GroupM y Cocina Media y se transmite los lunes por Discovery Familia y los miércoles por HGTV.
Sánchez ya se ha planteado una segunda temporada del programa, que podría desarrollarse en Texas, lugar donde vivió sus primeros años, tras emigrar con su familia.
La producción no le ha alejado del Fondo de Becas Aarón Sánchez, que apoya a chefs prometedores de la comunidad latina para que puedan matricularse en escuelas culinarias.
«Los latinos tenemos que apoyarnos para seguir ganando espacios y que nuestra cultura, nuestra comida, sea reconocida por el gran aporte que le da a Estados Unidos», insistió.