Antaño los precios de las materias primas y el dólar de Estados Unidos se movían en direcciones opuestas. No obstante, un documento reciente divulgado por el Banco de Pagos Internacionales, el banco de los banqueros centrales ubicado en Basilea, Suiza, indica que “los precios de las materias primas y el valor del dólar estadounidense recién se han movido en tándem hacia arriba y hacia abajo…ambos subieron en 2021 y 2022 y posteriormente se debilitaron juntos.” https://www.bis.org/publ/bisbull74.pdf
Los autores del documento B Hoffman, D. Igan y D. Rees, todos ellos funcionarios del banco de Basilea, describen como esta nueva correlación “se aparta significativamente del patrón estándar, por el cual la fortaleza del dólar va de la mano con precios bajos de las materias primas, y viceversa.”
Los factores identificados para explicar este cambio son tanto temporales como estructurales. El auge en los precios de las materias primas causado por la guerra en Ucrania y la fuga hacia la seguridad del dólar, junto a la apertura de la política monetaria en Estados Unidos, son algunos de los factores temporales. Mientras que un “determinante estructural” es el giro de Estados Unidos como exportador neto de petróleo y gas natural.
Los autores también describen algunas implicaciones, citando evidencia que los altos precios de las materias primas y la apreciación del dólar aumentan el riesgo de crecimiento débil con alta inflación, combinándose en el riesgo de “estanflación.”
A largo plazo, el documento concluye que esta nueva correlación entre los precios de las materias primas con la cotización del dólar puede conducir a mayor volatilidad y menos reciclaje de petrodólares, debido a la disminución de las importaciones de combustibles en Estados Unidos.