Ciudad de México, .- La muerte a balazos de un periodista en Michoacán eleva a siete el número de reporteros asesinados en lo que va de año en México, una cifra idéntica a la de todo 2021 que refleja los peligros para el gremio en un país cuyo presidente critica a diario a los medios de comunicación.
Una vez más se impuso la ley del «silencio o bala» en México. El periodista Armando Linares, director de Monitor Michoacán, fue asesinado este martes a balazos en el municipio de Zitácuaro, en su casa y frente a sus hijos.
A finales de enero, Linares había dado en redes la triste noticia del asesinato de Roberto Toledo, colaborador en el mismo medio.
«Nosotros no estamos armados, nosotros no traemos armas. Nuestra única defensa es la pluma, un lapicero una libreta», denunció entonces Armando en un vídeo.
Un mes y medio después, una ráfaga de balas acabó con su vida.
Desde inicio de año hasta la fecha hay siete periodistas asesinados por su labor periodística, la misma cifra que en 2021, según la ONG Artículo 19.
«Dados los antecedentes del asesinato de Roberto Toledo, las amenazas recibidas por Monitor Michoacán, y que Armando era su director, podemos considerar que es el séptimo asesinato en posible vínculo con la labor periodística de la víctima», dijo este miércoles a Efe el director para México y Centroamérica de Artículo 19, Leopoldo Maldonado.
El país suma 152 asesinatos de periodistas desde el 2000 a la fecha. Una tragedia que ha ido en aumento.
De los 152, 47 se registraron durante el mandato anterior del presidente Enrique Peña Nieto (2012-2018) y 32 en el actual de Andrés Manuel López Obrador, que lleva poco más de tres años en el cargo.
LA PRENSA EXIGE SEGURIDAD Y JUSTICIA
Como ha ocurrido en otras ocasiones, el asesinato ha impactado en todo el gremio. Y las redes sociales, una vez más, reaccionaron denunciando el caso.
Este miércoles, una treintena de comunicadores protestó en Morelia, capital del occidental estado de Michoacán, y gritaron consignas como: «Nos están matando».
También exigieron el fin de la impunidad, así como justicia y seguridad. Finalmente, lograron una reunión con las autoridades locales.
Magdalena Alonso, directora del Noticiero al Aire Zitácuaro, dejó en claro que en Zitácuaro y en el país no hay condiciones para realizar el periodismo, al considerar que los mecanismos de protección a los comunicadores no sirven de nada.
“Estoy muy consternada, muy preocupada y muy enojada. Tengo miedo porque cada vez nos damos cuenta que, si somos periodistas, donde te encuentren te van a matar. Los mecanismos de protección y el cuidado de los periodistas en México no existen, y aquí –con el asesinato de Armando Linares- están las pruebas”, indicó Magdalena Alonso a Efe.
LAS AUTORIDADES SE DEFIENDEN
Pese a la evidente falla en seguridad que supone que hayan asesinado más periodistas que nunca en tan breve espacio de tiempo, López Obrador condenó este miércoles los hechos y aseguró que no habría impunidad.
«Ahora estamos aplicados en proteger a los ciudadanos, proteger a los defensores de derechos humanos, proteger a los periodistas. Y repito, el Estado no reprime, no asesina. Y tampoco se permite la impunidad», remarcó el mandatario.
Aunque recientemente se han detenido a varios responsables de los asesinatos de periodistas, no existe la prevención, y los instrumentos oficiales de protección están llenos de lagunas.
«Los mecanismos de protección no van a funcionar con unos niveles de impunidad del 98 % en las agresiones contra la prensa. La protección debe ir precedida de la prevención y, en su caso, de procesos de justicia efectivos», lamentó Maldondado.
López Obrador aseguró este miércoles que Linares había rechazado protección federal, a diferencia de sus otros dos compañeros en el medio.
«El finado no aceptó la protección. Desde luego esto no justifica nada, pero se tiene que conocer toda la verdad y tenemos que ser muy puntuales porque hay mucha zopilotada (oportunismo)», apuntó el mandatario.
RIFIRRAFES CON SUS ADVERSARIOS
Pero López Obrador explicó también que hay un «bloque conservador mundial» que critica todas sus acciones.
La semana pasada, el Parlamento Europeo (PE) condenó las amenazas, el acoso y el asesinato de periodistas y defensores de los derechos humanos en México e instó a que estos crímenes se investiguen de manera «rápida, exhaustiva, independiente e imparcial».
En una dura carta, el presidente de México tachó a los eurodiputados de «borregos», y denunció «la corrupción, hipocresía e injerencismo» del Parlamento Europeo.
Y hoy retomó el tema: «Lo de la declaración de los diputados europeos lo único que demuestra es que son muy colonialistas, prepotentes», dijo.
Sus constantes ataques a la prensa preocupan al gremio: «El discurso del presidente contra la prensa es virulento y hostil y poco abona para generar condiciones de protección y seguridad para la prensa. Otros actores se sienten con permiso para agredir a la prensa», dijo Maldonado.
LA PALESTRA MATUTINA
En este contexto, el «diálogo circular» que debía ser la cada vez más larga conferencia diaria del mandatario desde Palacio Nacional se ha convertido en la palestra ideal para criticar a los medios de comunicación no afines.
Este mismo miércoles, en la sección de «¿Quién es quién en las mentiras de semana?», explicaron por ejemplo que el portal Latinus, del periodista Carlos Loret de Mola, compraba espacios en Facebook para publicitar sus informaciones contrarias al Gobierno federal.
Y un día antes, una periodista afín al Gobierno comenzó su pregunta con esta reflexión: «Cuando estudiamos en las escuelas de periodismo, siempre nos dicen que tenemos que consignar hechos. (…) Y los hechos son que su gobierno realiza muchas acciones que son inéditas en México y en el mundo».
Para Maldonado, se perdió el sentido original de las «mañaneras»: «Dejó de ser un espacio que aspiraba a transparentar y rendir cuentas por el ejercicio de gobierno y ahora es un espacio de estigmatización y ataque a quienes son críticos con el presidente».