MIAMI, FLORIDA – La crisis en Venezuela es un tema que interesa a una parte muy concreta del electorado. Ni siquiera es algo que importe a una gran mayoría del electorado hispano en Estados Unidos, que podría tener más interés en conocer propuestas sobre economía, de salud o de una posible reforma migratoria. Sin embargo, el tema venezolano continúa siendo un tema destacado en la campaña, especialmente cuando se trata de Florida.
Alrededor de 1,6 millones de latinos en Florida son elegibles para votar, según los últimos datos del Censo. Los cubanos y los puertorriqueños son mayoría, con 650.000 votantes en cada una de las comunidades, y después destacan los colombianos, con unos 190.000 que son elegibles para votar. La comunidad venezolana representa una pequeña parte de ese electorado, con 50.000 votantes.
¿Por qué siendo una parte tan pequeña del electorado, el voto venezolano acapara tanto interés en la campaña? Para entender una de las claves deberíamos remontarnos cuatro años atrás, cuando Hillary Clinton perdió el estado de Florida frente a Donald Trump por 130.000 votos.
Esos votos en Florida fueron los que dieron la victoria al actual presidente Donald Trump para llegar a la Casa Blanca. “Quién gana Florida, gana las elecciones en Estados Unidos”, comentó el analista político Javier Maza en una entrevista con la Voz de América.
Las encuestas auguran que Florida será el estado más disputado y que el candidato que resulte ganador ahí lo será con muy pocos votos. “Se va a jugar el estado de Florida, que es determinante para la elección, hasta el último voto”, pronosticó el periodista Daniel Coronell en una intervención en el podcast de The Washington Post.
Y esos votos, que marcarían la diferencia, podrían recaer en la comunidad venezolana, sobre todo si tenemos en cuenta que un pequeño número de votos es el que puede acabar dando la victoria a uno u otro candidato. Eso fue lo que pasó hace cuatro años y se puede volver a repetir en esta ocasión.
“El discurso anti chavista funciona en Miami”
El presidente Donald Trump ha señalado a la candidatura demócrata de estar respaldada por la izquierda más radical de América Latina, con Venezuela, Cuba o Nicaragua, y advirtiendo que si Joe Biden llega al poder, Estados Unidos se puede convertir en un país comunista.
“(Joe Biden y Kamala Harris) no son afines al castrochavismo, lo que pasa es que en la sobresimplificación que hay para buscar el voto cubano, colombiano y venezolano están buscando la manera de señalarlos y de colgarles el estigma porque es un discurso que ha funcionado mundialmente”, remarcó Coronell.
Según él, el hecho de que “en Miami haya muchas personas exiliadas a causa de los regímenes de Cuba, Venezuela y Nicaragua” hace que ese tipo de discursos sean mucho más efectivos para que, después de todo, se puedan asegurar los votos.
Un informe de la Universidad del Norte de Florida señala que 7 de cada 10 venezolanos se inclinaría por la opción republicana y que el 98 por ciento de los que son elegibles para votar van a ir a ejercer su derecho para los comicios del 3 de noviembre.
Ese aspecto se abordó hace unas semanas en una conferencia que, precisamente, analizaba el impacto del voto venezolano en las elecciones de Florida.
“En Florida hay una buena relación de Trump con algunos segmentos del voto latino”, dijo Eugenio Martínez, analista político, en unas declaraciones recogidas por El Diario. “Lo que vemos en el elector venezolano, particularmente, es que ya sea del Partido Republicano o Demócrata, tiene una alta coincidencia con la postura de la administración de Trump sobre el tema venezolano”, agregaba.
En el lado opuesto, el analista político, Carlos Pereira, un venezolano de tendencia demócrata, lamenta a la VOA que los republicanos “se estén aprovechando” de la crisis política y humanitaria en Venezuela para sacar rédito electoral.
“Donald Trump está mintiendo y sabe que no va a hacer nada porque sus intereses no se lo permiten”, subrayó.
Joe Biden, por su parte, también se ha desmarcado de esas acusaciones de Trump. Incluso ha repetido en varias ocasiones que él condena las acciones de Nicolás Maduro al frente del Palacio de Miraflores y que tiene la intención de seguir presionando al gobierno en disputa para que abandonen el poder.
En las últimas semanas, la campaña demócrata ha intensificado los actos en ciudades como Doral, donde vive la mayor población venezolana de Estados Unidos, con el objetivo de cautivar el voto de los indecisos, conscientes de que unos pocos votos podrían acabar dando la victoria en el estado de Florida.
Sin embargo, varios analistas coinciden al afirmar que si bien “el voto de los electores venezolanos es importante, no va a ser determinante” en las elecciones presidenciales.
“Hay comunidades mucho más grandes en este país que serán más determinantes que lo que ahora es la venezolana”, apostilló Alfredo Ortega, otro analista político consultado por la VOA.