Estados Unidos.- Los demócratas en el Congreso tomaron un primer paso para reformar las leyes policiales en respuesta a la muerte el 25 de mayo de George Floyd, un ciudadano afroamericano que estaba bajo custodia policial.
Desde la muerte de Floyd, manifestantes han salido a las calles de todo el país en cifras históricas, muchos de ellos promoviendo una salida dramática para afrontar parcialmente el problema de la discriminación racial: “Reducir el financiamiento a la policía”.
Mientras ese llamado para trasladar el financiamiento de los departamentos de policía locales hacia servicios sociales no está cubierto por la legislación congresional, la medida incluye muchas otras propuestas ambiguas que los demócratas dicen que cambiarían las políticas policiales de un modelo “guerrero” a uno de “guardián público”.
¿Puede el Congreso de Estados Unidos “Reducir el financiamiento a la policía?
El financiamiento a nivel federal, es decir los fondos asignados por el Congreso estadounidense, es solo una parte del financiamiento que reciben los departamentos de policía en Estados Unidos. La mayor parte de su financiamiento proviene de fuentes locales y estatales, por lo que aunque quisieran hacerlo, el Congreso no puede retirar todo el financiamiento a un departamento de policía municipal.
Los demócratas han aplastado los llamados a desfinanciar completamente los departamentos de policía, promoviendo en lugar cambios en las prioridades del financiamiento, para dar más atención a servicios sociales.
«Creo que puede ser usado como una distracción y esa es mi preocupación”, dijo la congresista demócrata, Karen Bass, de California. “Creo que la intención detrás de esto es algo que yo respaldo, la idea de que las comunidades necesitan más inversión”.
¿En qué consiste la legislación demócrata?
«Este es el esfuerzo más integral del Congreso en décadas para atender sustancialmente el tema de la mala conducta policial al aborda temas críticos que afectan a las comunidades negras y cafés”, dijo Vanita Gupta, ex Fiscal Federal adjunta para derechos civiles durante la administración de Barack Obama.
Según explicó el miércoles en presidente de la Comisión Judicial de la Cámara de Representantes, el representante por Nueva York, Jerry Nadler, la legislación crearía grupos de trabajo locales para asuntos policiales y promovería estrategias para mejorar los servicios de la policía como el uso de cámaras corporales y mejores entrenamientos.
«El proyecto de ley facilitaría al gobierno federal perseguir los casos de mala conducta policial, prohibiría las maniobras de estrangulamiento, terminaría las prácticas de tratar a las personas en base a sus perfiles raciales o religiosos, y eliminaría la dudosa doctrina de inmunidad calificada para los policías”, dijo Nadler.
Acabar con la inmunidad calificada, un principio legal que provee protección a los policías de demandas a menos que hayan violado leyes claramente establecidas o derechos constitucionales, posiblemente será uno de los puntos más difíciles para negociar entre demócratas y republicanos.
¿Qué pasará ahora con la legislación?
Los demócratas se preparan para terminar de pulir el Proyecto de ley para que este sea sometido a votación la próxima semana El líder de la mayoría de la Cámara, Steny Hoyer, de Maryland, anunció que se restablecerán las sesiones en las semanas del 22 y 29 de junio, para poder realizar una votación en esas semanas.
Cualquier ley aprobada por la Cámara, dominada por los demócratas, tiene luego que pasar a ser considerada en el Senado, controlado por los republicanos, Pero a los legisladores se les está agotando el tiempo para considerar cualquier reforma policial. Los senadores tienen previsto un receso para ir a sus hogares en sus estados durante dos semanas en julio. El receso se extiende a casi todo agosto y parte de septiembre. El líder de la minoría en el senado, el demócrata Chuck Shumer, ha dicho que teme que los demócratas no lleguen a tener el impulso para alcanzar resultados.
«Necesitamos poner esta ley completa en el Senado para ser debatida, todo el tema de justicia y de la policía”, le dijo Shumer a los periodistas el martes. “Aprobar solo una parte sería un acto de abandono de nuestras obligaciones y segundo, estoy muy preocupado. Recuerden que cuando hubo mucha violencia con armas de fuego, el líder de la mayoría republicana dijo que “nosotros vamos a atender esto, etc… Y nunca hicieron nada. Tengo miedo que lo mismo vaya a pasar ahora”.
¿Cómo están respondiendo los republicanos?
El senador Tim Scott, de Carolina del Sur, el único afroamericano republicano en el Senado, está encabezando un esfuerzo que espera tener el respaldo del presidente Donald Trump.
Al anunciar el esfuerzo de Scott, el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, dijo el martes que “todavía estamos lidiando con el pecado original de Estados Unidos. Tratamos de mejorar pero de vez en cuando queda claro que nos falta mucho para llegar a la meta. Y creo que la mejor forma para los republicanos del Senado para avanzar en esto es escuchar a uno de los nuestros, que ha tenido estas experiencias, las ha tenido desde que llegó al Senado de Estados Unidos”.
Aunque aún no hay un texto formal para las propuestas republicanas, los legisladores han dado señales de que estarían buscando los mismos objetivos, terminar las maniobras policiales de estrangulamiento y mejorar el entrenamiento, aunque a través de distintos medios que los demócratas. Hablando en una audiencia judicial en la Cámara sobre reformas policiales, el representante Mike Johnson, de Luisiana, resumió las metas republicanas para atender el asunto.
«Desde donde estamos actualmente, creemos que las reformas deben centrarse en tres conceptos, transparencia, entrenamiento y despido de esas raras manzanas podridas que violan la ley y la legitimidad que sostiene a nuestro sistema legal”, dijo Johnson.
Pero un significativo punto de discusión podría ser el tema de la inmunidad calificada. En una audiencia el martes, la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, dijo específicamente que terminar con la inmunidad calificada es una iniciativa que trabaría las negociaciones.
La pregunta clave es si Trump, quien ha estado tuiteando durante las protestas sobre la necesidad de ley y orden, estaría dispuesto a firmar cualquier nueva ley que lo distancie de su base política en un año electoral.
Históricamente, el Congreso de Estados Unidos raramente aprueba leyes ambiciosas en los meses previos a una elección. Pero la opinión pública estadounidense está tan atenta a estos temas que pareciera ser del interés de los legisladores atender por lo menos algunos aspectos del problema. Según Civiqis, una firma de encuestas, el respaldo de los estadounidenses hacia el movimiento las “Vidas Negras Importan” ha aumentado tanto en las últimas dos semanas, como lo que aumentó en los últimos dos años.