San Juan, Puerto Rico.– Solo el 22 % de las mujeres encuestadas ocupa un puesto de supervisión en Puerto Rico, según el estudio publicado este miércoles sobre las Necesidades de la Mujer Trabajadora.
El estudio, del Instituto de Estadísticas de Puerto Rico y la Oficina de la Procuradora de la Mujer, contó con la participación de 13.283 personas y tiene como objetivo identificar las necesidades y desafíos de la mujer trabajadora para proporcionar posibles soluciones.
De los resultados del estudio, se destaca que el 95 % de las mujeres trabajadoras encuestadas contaban con uno o más empleos y que un 38 % trabajaba en una agencia o rama de gobierno.
El 72 % de las mujeres embarazadas encuestadas indicaron que el patrono siempre les proporcionó flexibilidad para asistir a citas médicas y atender síntomas durante el embarazo.
Respecto a la lactancia, un 47 % indicó que su lugar de empleo no posee un salón de lactancia, mientras que el 64 % de las mujeres que utilizaron el salón proporcionado por el patrono consideró que el tiempo ofrecido no fue adecuado.
Además, un 47 % de las mujeres trabajadoras indicó ser la dueña legítima y aún estar pagando la hipoteca de la vivienda y una de cada tres (34 %) expresó la necesidad de un(a) cuidador(a) para sus hijos, dependientes o familiares.
La mayoría afirmó tener un nivel de salud emocional y físico bueno, aunque el 63 % experimenta o ha experimentado una «doble jornada laboral».
En cuanto a la violencia de género, el 34 % dijo haber sido víctima de acoso laboral y el 24 % reconoció haber sido víctima de violencia doméstica.
Una de cada cuatro (24 %) denunció, además, haber sufrido discriminación por género.
«Agradezco a las miles de mujeres que participaron de este importante estudio. Su insumo detallado nos permitirá tomar acción y crear iniciativas dirigidas a empresas y patronos para que puedan mejorar y reforzar las áreas de mayor necesidad», manifestó la procuradora interina, Madeline Bermúdez.
Bajo el lema «Todas somos mujeres trabajadoras», el cuestionario electrónico fue dirigido a mujeres en distintos sectores, incluyendo el público y privado, amas de casa, cuidadoras, empresarias y aquellas que trabajan de forma independiente.
