San Juan, Puerto Rico.- El Instituto de Estadísticas de Puerto Rico (IEPR) presentó este viernes un informe sobre la mortalidad en la isla que destaca que 2017 y 2020 fueron los años más mortíferos de las últimas tres décadas debido al devastador huracán María y la pandemia de la covid-19.
En el 2017, Puerto Rico reflejó el número más alto de defunciones, hasta esa fecha, con 31.094 fallecidos, que representó alrededor de 1.700 muertes más comparado con el promedio de decesos en los últimos 30 años, según el Informe Anual Estadísticas sobre Mortalidad en Puerto Rico (2017-2020).
El texto refleja que entre 2017 y 2018 fueron registradas 59 muertes con relación a los huracanes en alguna de las secciones del certificado de defunción. De ellas, 23 fueron codificadas como víctimas de tormenta cataclísmica.
En 2018, el Gobierno de Puerto Rico encomendó un estudio sobre el exceso de muertes relacionadas al huracán al Instituto Milken de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de George Washington que estimó 2.975 muertes en exceso entre los meses de septiembre del 2017 a febrero del 2018.
El paso del huracán María causó una gran destrucción en Puerto Rico y el corte total de electricidad, que dejó a algunos puertorriqueños hasta un año sin acceso al servicio eléctrico.
El 2017 fue superado por el 2020, que fue el año con el mayor número de defunciones registradas en los últimos 30 años con 32.223 muertes.
Este dato representa alrededor de 2.800 fallecidos más que el promedio de muertes desde el año 1990, y un aumento de alrededor del 8 % comparado con el año anterior.
Entre 2017 y 2020, las primeras 2 causas de muerte en Puerto Rico fueron las enfermedades del corazón y tumores malignos o cáncer y la tercera causa fue diabetes mellitus.
Además, el estudio señaló que en 2020, como consecuencia de la pandemia de la covid-19, esta se convirtió en la quinta causa de muerte en ese año.
El informe indicó que durante los 4 años analizados entre las 10 principales causas de muerte masculinas están los homicidios, mientras que ese tipo de decesos no destacan en el género femenino.
Respecto a la mortalidad infantil, el informe subrayó que en las últimas 2 décadas, el número de muertes infantiles ha estado disminuyendo, de 589 muertes infantiles para el año 2000 a 142 muertes infantiles en 2020.
Durante este periodo, la tasa de mortalidad infantil ha disminuido entre 9,9 muertes infantiles por cada 1.000 nacimientos en el año 2000 a 6,6 muertes infantiles por cada 1.000 en 2019.
No obstante, para 2020, la tasa de mortalidad infantil se incrementó respecto al año anterior, siendo de 7,1 muertes por cada 1.000 nacimientos.
De 2017 a 2019, las muertes neonatales se redujeron, de 121 muertes de menores de 28 días en el año 2017, a 79 en el 2019, pero en el 2020 aumentaron a 110.