El pasado 2 de febrero la Administración Biden anunció que está tomando nuevas medidas para asegurarse de que los puertorriqueños tengan acceso a la energía limpia. Después del huracán María en 2017, la infraestructura eléctrica de la isla se vio diezmada iniciando un apagón de 11 meses de duración, el apagón más largo en la historia de los Estados Unidos. Tras el desastre, el Congreso autorizó fondos para reconstruir y transformar la red eléctrica de la isla, pero Puerto Rico sigue dependiendo principalmente de la generación de energía mediante combustibles fósiles, un problema que varias organizaciones y líderes comunitarios quieren cambiar.
Existe una oportunidad única para transformar la red eléctrica de Puerto Rico
- Actualmente, Puerto Rico continúa dependiendo principalmente de combustibles fósiles poco confiables, caros, ineficaces y contaminantes para generar electricidad. Cerca del 97% de la electricidad de la isla proviene de combustibles fósiles, el 49% proviene del petróleo, el 29% del gas natural y el 19% del carbón. Solo el 3% de la energía de la isla proviene de fuentes renovables.
- Los fondos para desastres no han sido asignados para la energía renovable. Después del huracán María, el Congreso autorizó $23 mil millones en ayuda por desastre, incluidos más de $12 mil millones para restaurar la red eléctrica de la isla. FEMA administra los fondos asignados para reconstruir el sistema eléctrico, pero una ínfima parte ha sido destinada a la energía renovable.
- Puerto Rico tiene metas de política energética importantes que alcanzar. Puerto Rico estableció metas de política energética, que exigen que el 40% de la electricidad provenga de energía renovable para 2023 y el 100% para 2050.
- La Administración Biden dice estar comprometida a ayudar a Puerto Rico a invertir en una red de energía limpia, resistente y asequible. FEMA y HUD están trabajando en colaboración con el gobierno de Puerto Rico para administrar los fondos federales de recuperación destinados a reconstruir y mejorar el sector energético.
- Expandir la energía limpia es esencial para Puerto Rico y todo el país. La energía limpia es clave para reducir las emisiones y el cambio climático y continúa siendo el generador de empleos más grande en todo el sector energético de Estados Unidos, empleando casi 3 veces más trabajadores que los trabajadores empleados en la extracción y generación de combustibles fósiles. La Ley Build Back Better tendría el potencial de llevarlo a cabo esto, contribuyendo a una economía de energía limpia, generando millones de este tipo de empleos, reduciendo las facturas de electricidad, al tiempo que invierte en justicia ambiental, disminuyendo la contaminación que está calentando el planeta y combatiendo el cambio climático para las generaciones futuras.
Una transición a la energía limpia traería beneficios sustanciales a las comunidades puertorriqueñas
- La energía limpia generará energía más resistente, confiable y más barata para Puerto Rico. Un estudio de 2015 realizado por el instituto sin fines de lucro, Instituto de Economía de la Energía y Análisis Financiero, encontró que invertir en energía solar y eólica y eficiencia energética podría transformar el sistema eléctrico de Puerto Rico en una red resistente.
- Las organizaciones comunitarias y las comunidades de la isla están listas para una transición inteligente a la energía limpia. Grupos locales han organizado planes como Queremos Sol, una hoja de ruta para transformar el suministro de energía de Puerto Rico en energía solar.
- Puerto Rico puede servir como modelo para los Estados Unidos. Dada la luz solar de la isla durante todo el año, los estudios han demostrado que Puerto Rico puede ser un modelo para la implementación a gran escala de la energía solar en la azotea y el almacenamiento de baterías.