La población latina que vive en Estados Unidos es cada vez más diversa, y quiere ver reflejada esta pluralidad para reconocerse en los medios, las producciones audiovisuales o las campañas publicitarias que se dirigen a ellos. Un estudio de la consultora Nielsen, especializada en la medición y análisis de datos, destaca que los latinos estadounidenses -de los que dos tercios son nacidos en suelo norteamericano- se niegan a ser vistos como un grupo monolítico.
Esta diversidad que reclaman no solo se refiere a sus distintos orígenes nacionales, sino a lo que ahora se llaman «identidades interseccionales», según sus opciones de vida o preferencias, sean políticas a sexuales, sin olvidar las identidades cruzadas como afrolatinos o latinos asiáticos.
Los 62,3 millones de latinos que viven en Estados Unidos tienen cada vez mejor nivel educativo y más poder adquisitivo, y están llamados a ser «un factor clave en el motor económico de la nación en las próximas décadas», por lo que sus particularidades son de evidente interés para las marcas y las campañas publicitarias.
El carácter eminentemente joven de esta población -58 % tienen menos de 34 años- significa que son una población con altas expectativas ante los creadores de contenidos, de los que esperan «diversidad, inclusión, justicia social y equidad», y son igualmente altos consumidores de redes sociales donde quieren verse reflejados.
Su creciente poder adquisitivo, calculado en 2.600 millones de dólares en los próximos tres años debe ser tenido en cuenta por las marcas, las plataformas audiovisuales y las compañías en general para lograr que los latinos se vean reflejados en esos contenidos.