Al menos 29 personas han muerto por los fuertes tornados que han azotado el medio oeste y sur de Estados Unidos.
El número exacto de fallecidos se desconoce y podría aumentar en los próximos días a medida que los servicios de emergencia de los estados más afectados recorren las calles para evaluar los daños y encontrar supervivientes, a veces yendo incluso puerta por puerta.
“CAOS ABSOLUTO” EN UNA SALA DE CONCIERTOS EN ILLINOIS
En el norte de Illinois, los tornados dejaron una escena de «caos absoluto», en palabras del jefe de policía de Belvidere Shane Woody, recoge el Chicago Tribune.
En concreto, los tornados hicieron que colapsara parcialmente el tejado de un teatro donde 260 personas estaban en ese momento asistiendo a un concierto de heavy metal, lo que ha dejado un fallecido y 48 heridos, de los que cinco están en estado grave, según el gobernador de Illinois.
El gobernador, que visitó este domingo los escombros del teatro, alabó la rápida respuesta de los servicios de emergencia y la ayuda que se prestaron los vecinos unos a otros.
“La gente que vive cerca enseguida vino a sacar a la gente de entre los escombros. Y creo que eso es especialmente impresionante”, afirmó Pritzker en una rueda de prensa que fue retransmitida por su página oficial de Facebook.
EL TEMPORAL SE MUEVE HACIA EL NORESTE
En las últimas horas, la tormenta se movió hacia el noreste de EE.UU. y golpeó con especial dureza los alrededores de la localidad de Bridgeville (Delaware), donde la Policía encontró el sábado por la noche a una persona sin vida en una casa especialmente dañada por el temporal, informó la Policía estatal.
Según el Servicio Meteorológico Nacional, las tormentas podrían continuar durante la próxima semana y volver a golpear con fuerza el martes a los mismos estados del medio oeste y sur de EE.UU. que han sufrido estragos en las últimas horas.
Además, hay riesgo de que se produzcan severas tormentas con rayos este domingo en el noreste de Texas, incluida la ciudad de Dallas, de acuerdo al Servicio Meteorológico Nacional
Aparte de los daños humanos y de infraestructuras, los tornados han hecho que este domingo estén sin electricidad unos 75.000 hogares en Pensilvania, otros 45.000 en Ohio y más de 21.000 en Arkansas, algunos de los estados más afectados por los fuertes vientos, según los datos de la web PowerOutage.us, que monitoriza este servicio.