El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reiteró sus críticas y lanzó una advertencia a los «activistas radicales» previo a la celebración el lunes del Día del Descubrimiento de América, conocido como Día de Colón (Columbus Day), un feriado que arrancó el domingo por la noche con protestas en Portland, Oregon, donde manifestantes derribaron las estatuas de los expresidentes Theodore Roosevelt y Abraham Lincoln.
«Hace más de 500 años, el intrépido viaje de Cristóbal Colón al Nuevo Mundo marcó el comienzo de una nueva era de exploración y descubrimiento. Sus viajes llevaron al contacto europeo con las Américas y, un siglo después, los primeros asentamientos en las costas del Estados Unidos de hoy en día. Hoy, celebramos el Día de la Raza para conmemorar al gran italiano que abrió un nuevo capítulo en la historia mundial y para apreciar su importancia duradera para el hemisferio occidental», indicó el presidente Donald Trump en una proclama por la efeméride publicada el viernes 9 de octubre.
«Hago un llamado al pueblo de Estados Unidos para que observe este día con ceremonias y actividades apropiadas. También ordeno que la bandera de Estados Unidos se exhiba en todos los edificios públicos el día señalado en honor a nuestra diversa historia y a todos los que han contribuido a dar forma a esta Nación», escribió el mandatario.
En su proclama del viernes, Trump reiteró la posición de su gobierno sobre actos del tipo de lo ocurrido el domingo en Portland y halagó a la comunidad italo-estadounidense.
«Lamentablemente, en los últimos años, los activistas radicales han tratado de socavar el legado de Cristóbal Colón. Estos extremistas buscan reemplazar la discusión de sus vastas contribuciones con hablar de fallas, sus descubrimientos con atrocidades y sus logros con transgresiones. En lugar de aprender de nuestra historia, esta ideología radical y sus seguidores buscan revisarla, privarla de todo esplendor y marcarla como intrínsecamente siniestra (…) No debemos ceder a estas tácticas ni consentir una visión tan sombría de nuestra historia. Debemos enseñar a las generaciones futuras sobre nuestro legado histórico, comenzando con la protección de monumentos a nuestros intrépidos héroes como Colón», escribió Trump.
El presidente estadounidense además señaló que la nación «se beneficia de la calidez y generosidad de casi 17 millones de italo-estadounidenses (…) Para nuestras hermosas comunidades italo-estadounidenses, y estadounidenses de todos los orígenes, Colón sigue siendo una figura legendaria».
Protestas
En otro sentido, en la noche del domingo manifestantes salieron a las calles de Portland, Oregon, para asistir a la convocatoria del «Día de la Ira de los Pueblos Indígenas», en rechazo al feriado federal del lunes, que celebra la controvertida figura de Colón. Según los indígenas, fue el italiano el que desencadenó siglos de genocidio contra la población indígena de las Américas.
La agencia AP y medios locales informaron que el grupo rodeó con cadenas la estatua de Roosevelt, mientras manifestantes lanzaron pintura roja sobre la figura y empezaron a utilizar un soplete en la base de la estatua.
Incluso la multitud derribó la estatua poco después de las 9:00 pm (hora local). El grupo se dirigió entonces a la estatua de Lincoln, que derribó unos ocho minutos después.
Tras derribar las estatuas, la multitud empezó a reventar ventanas en la Sociedad Histórica de Oregon y más tarde fue a la oficina de Seguridad Pública del campus de la Universidad Estatal de Portland.
La policía declaró más tarde que se estaba produciendo un disturbio y ordenó al grupo que se dispersara. La policía advirtió que cualquiera que participara en «comportamiento criminal, incluido el vandalismo» podría ser detenido. No quedó inmediatamente claro si se produjeron detenciones.
Los monumentos se sumaron a otras estatuas derribadas en una oleada de protestas desencadenada por la muerte el 25 de mayo de George Floyd a manos de la policía de Minneapolis.
La advertencia de Trump
En su proclama, Trump también ordenó a las agencias federales que pongan fin a los programas de capacitación en diversidad, argumentando que muchos de esos programas «se basan en el mismo tipo de historia revisionista que está tratando de borrar a Cristóbal Colón de nuestra herencia nacional».
«Juntos, debemos salvaguardar nuestra historia y detener esta nueva ola de iconoclastia oponiéndonos a quienes propagan el odio y la división», declaró Trump.
