Fotografías de campaña donde aparecen las latinas republicanas (de izq. a dcha.) Mayra Flores, Mónica de La Cruz y Cassy García, conocidas como "La triple amenaza", que buscan conquistar con la ayuda del voto latino los distritos 34, 15 y 28, todos fronterizos con México. (Foto: EFE/Fotos de campaña)

Un total de 36 latinas -20 demócratas y 16 republicanas- aspiran el próximo 8 de noviembre a un escaño en la Cámara de Representantes en Washington, un aumento del 12,5 % respecto al récord establecido en 2020, según un análisis del Center For Women And American Politics (CAWP).

Para 2020 las latinas habían alcanzado 32 nominaciones, y dos años después la cifra en la contienda final para un puesto en la Cámara es de 36, siendo las republicanas las que más contribuyeron a este incremento, destacó el análisis del centro de la Universidad de Rutgers, en Nueva Jersey.

Kelly Dittmar, directora de investigación de CAWP, calificó además de «muy importante» el progreso en el número de latinas que entraron a las primarias (86) y de las que lograron estar en la boleta del 8 de noviembre.

La investigadora explicó a EFE que el aumento también refleja la diversidad de puntos de vista políticos de la comunidad latina.

«Los latinos no son un grupo homogéneo que vote por un solo partido», dijo, y puso de ejemplo la elección de Mayra Flores, quien gracias a su triunfo en los comicios especiales de junio pasado se convirtió en la primera congresista federal latina del Partido Republicano elegida por Texas.

La cifra de latinas republicanas que buscan un escaño en la Cámara de Representantes de EE. UU. registró un aumento del 23,1% al pasar de 13 nominadas en 2020 a 16 en 2022. En el lado demócrata, la lista de aspirantes latinas que lograron la nominación pasó de 19 en 2020 a 20 en 2022, un aumento de 5,3 %.

Las latinas también pueden hacer historia en siete estados (Colorado, Illinois, Massachusetts, Maryland, Oregón, Pensilvania y Virginia) donde nunca ha sido elegida una hispana a la Cámara de Representantes.

De ellas la candidata con mayor oportunidad de alzarse con la victoria es la demócrata Delia Ramírez, que compite con el republicano Justin Burau por el rediseñado Distrito 3 de Illinois, que incluye el noroeste de Chicago.

Las candidatas demócratas Yadira Caraveo, que compite por un puesto de Colorado; Andrea Salinas y Lori Chavez-DeRemer, nominadas para pelear por sendos escaños por Oregón, y la republicana Yesli Vega, que busca una silla por Virginia, también tienen posibilidades de ganar sus escaños, destacó el informe de CAWP.

Dittmar destacó como un gran avance el hecho de que mujeres que pertenecen a minorías apuesten por representar distritos de mayoría blanca porque con esto «se echan abajo los reclamos de que una mujer no blanca no puede ganar en estos distritos».

Las latinas también se abrieron paso en estados de gran presencia hispana como Texas y Florida. Por ejemplo, la republicana Anna Paulina Luna está en una reñida carrera con el demócrata Eric Lynn por el Distrito 13 en Florida.

Mientras, en el estado de la Estrella Solitaria, la también republicana Cassy García se enfrenta al congresista demócrata Henry Cuéllar, y la congresista republicana Flores busca retener su escaño ante el experimentado demócrata Vicente González Jr.

Este 2022 las latinas también se enfrentan entre sí. Una de las competencias más reñidas se vislumbra en Florida, donde la demócrata Annette Taddeo se enfrenta a la congresista republicana María Elvira Salazar por el Distrito 27.

En Texas, la demócrata Michelle Vallejo se enfrenta a la republicana Mónica De La Cruz, y la congresista demócrata Verónica Escobar busca retener su puesto ante la republicana Irene Armendáriz Jackson.

En Nuevo México la republicana Alexis Martínez Johnson busca arrebatarle el escaño a la demócrata Teresa Leger Fernández.

Las latinas quedaron rezagadas en la competencia por las gobernaciones de estados en las elecciones del 8 de noviembre. De las 25 mujeres en liza en 2022 sólo una es latina: de acuerdo con las encuestas, la gobernadora demócrata de Nuevo México, Michelle Luján Grisham, de raíces mexicanas, debe retener su puesto.

En cuanto al Senado, sólo dos latinas llegaron hasta la etapa de nominación.

La demócrata Catherine Cortez Masto, la primera senadora latina de EE. UU., busca su reelección por Nevada. Sin embargo, su puesto es considerado uno de los más vulnerables para el Partido Demócrata.

La cubanoestadounidense Leora Levy es la apuesta del Partido Republicano en la contienda senatorial en Connecticut, donde las encuestas le pronostican una derrota.

El panorama futuro en el Senado y las gobernaciones para Dittmar no es desalentador, ya que la llegada de Lujan Grisham y Cortez Masto «ha demostrado que esos puestos son accesibles a otras latinas y minorías» y va a abrir el camino para otras.

«Es lo que estamos viendo en la Cámara de Representantes. Otras mujeres están siguiendo el ejemplo y lanzándose a estas carreras políticas», señaló.

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