demócratas
El candidato demócrata a la vicepresidencia de EE. UU., el gobernador de Minnesota Tim Walz, levanta los brazos durante la Convención Nacional Demócrata realizada en Chicago el miércoles 21 de agosto de 2024. (Foto: AP/Matt Rourke)

La Convención Nacional Demócrata 2024 fue una oportunidad para hacer evidente un cambio generacional y para convertir la creciente energía y coalición que respaldan la fórmula Harris-Walz en más votos que los favorezcan en los estados que decidirán estas elecciones.

En Pensilvania Harris y Walz hicieron campaña en autobús un día antes del inicio de la convención.

Los candidatos demócratas, junto a sus cónyuges, Doug Emhoff y Gwen Walz, compartieron con voluntarios de su campaña, con bomberos y con un equipo de fútbol americano de una secundaria, al recorrer una región tendencialmente republicana. Se apegaron a mensajes enfocados en el carácter, la perseverancia y el futuro de Estados Unidos.

En Rochester Harris habló de fortaleza y liderazgo: “La medida real y verdadera de la fortaleza de un líder se basa en a quién ayudas a ponerse de pie, más que en a quién derribas”.

“Cualquiera que esté enfocado en hundir a otras personas es un cobarde”, gritó, generando vítores y aplausos. “Así es como se ve la fuerza”.

Walz volvió a adoptar un tono de entrenador con los jóvenes deportistas, en remembranza de los días que estuvo al frente de un equipo y reflexionó sobre el carácter deportivo, antes de presentar a Harris. Ella elogió a los jóvenes atletas por su liderazgo: “Nuestra nación cuenta con ustedes y su excelencia. Elogiamos la ambición que tienen”. Además, les dijo: “Bienvenidos al club del modelo de conducta”.

El lunes, mientras arrancaba la convención, la campaña puso en marcha go.kamalaharris.com, una plataforma única para que los voluntarios encuentren eventos cercanos, se unan a las comunidades en línea. Y abrieron un canal de WhatsApp enfocado en latinos.

El jueves, el Equipo Harris-Walz organizó 500 “watch parties” en los 50 estados, para ver el discurso de aceptación de la nominación oficial de Kamala Harris.

LA ESPERANZA RENOVADA

El lunes por la noche, después de más de cinco décadas de dedicación devota al servicio público, Biden, de 81 años, recibió más de 4 minutos de ovación; lo recibieron como a un héroe, por su medio siglo de trabajo, pero sobre todo por haber dejado su lugar a Kamala Harris, semanas después de que lo presionaran para que abandonara su candidatura a la reelección.

Un mes después, el cierre de la de apertura de la convención en Chicago se vivió como el traspaso oficial, no solo a Harris si no a una nueva generación. Aprovechó para enumerar los logros de su mandato, que, según insistió en varias ocasiones, fueron de ambos, y agregó:

“Nominar a Kamala es la mejor decisión que tomé (…) Es fuerte, tiene experiencia y tiene una integridad enorme (…) Será una presidenta de la que todos estemos orgullosos”.

El martes el matrimonio Obama volvió a hacer vibrar a la audiencia. El expresidente Barack y la ex primera dama Michelle llamaron al país a acoger a Kamala. Con mensajes contundentes urgieron a los demócratas y a todos los estadounidenses a escucharse y unirse.

“Estados Unidos, la esperanza está de regreso”, declaró ella apelando al “poder contagioso de la esperanza”.

“La expectativa, la energía, la euforia de estar una vez más en el umbral de un día mejor. La oportunidad de vencer a los demonios del miedo, la división y el odio que nos han consumido y continuar persiguiendo la promesa inacabada de esta gran nación, el sueño por el que nuestros padres y abuelos lucharon, murieron y se sacrificaron”, expresó la ex primera dama.

Michelle hizo referencia al legado de su madre, quien murió en mayo. “Mi madre se ofreció como voluntaria en la escuela local. Siempre cuidaba de los demás niños del barrio. Le encantaba hacer el trabajo ingrato y poco atractivo que durante generaciones ha fortalecido el tejido de esta nación. La creencia de que si haces algo por los demás, si amas a tu prójimo, si trabajas, te esfuerzas y te sacrificas, tendrás recompensa. Si no es para ti, tal vez sea para tus hijos o tus nietos”.

Y agregó: “Kamala Harris y yo construimos nuestras vidas sobre los mismos valores fundamentales. Aunque nuestras madres crecieron a un océano de distancia, compartían la misma creencia en la promesa de este país. Por eso su madre se mudó aquí desde la India a los 19 años. Por eso le enseñó a Kamala sobre la justicia, sobre la obligación de ayudar a los demás, sobre nuestra responsabilidad de dar más de lo que recibimos”.

A manera de un paso de antorcha sobre su movimiento basado en la esperanza dijo: “Mi chica, Kamala Harris, está más que preparada para este momento. Es una de las personas más calificadas que jamás haya aspirado a la presidencia. Y es una de las más dignas”.

“Kamala sabe, como nosotros, que sin importar de dónde vengas, cómo luzcas, a quién ames, a quién adores o cuánto tengas en tu cuenta bancaria, todos merecemos la oportunidad de construir una vida decente. Todas nuestras contribuciones merecen ser aceptadas y valoradas”, puntualizó.

Dijo que personas como ellas “si vemos una montaña frente a nosotros, no esperamos que haya una escalera mecánica que nos lleve a la cima. No. Bajamos la cabeza y nos ponemos a trabajar… Y eso es lo que hemos visto en Kamala Harris a lo largo de toda su vida: el acero de su columna vertebral, la firmeza de su educación, la honestidad de su ejemplo y sí, la alegría de su risa y su luz”.

“No podría ser más obvio. De los dos principales candidatos en esta contienda, solo Kamala Harris comprende verdaderamente el trabajo invisible y el compromiso inquebrantable que siempre han hecho grande a Estados Unidos. Ahora, lamentablemente, sabemos lo que viene después. Sabemos que la gente va a hacer todo lo posible para distorsionar su verdad. Lamentablemente, mi esposo y yo sabemos algo sobre esto”, reflexionó Michelle.

Y añadió: “Durante años Donald Trump hizo todo lo que estuvo a su alcance para intentar que la gente nos tuviera miedo. Porque nadie tiene el monopolio de lo que significa ser estadounidense. Nadie”.

Interrumpida en varias ocasiones con ovaciones, arremetió contra el expresidente Trump, marcando un contraste en comparación con su discurso en la convención de 2016, cuando le dijo al partido: “Cuando ellos lanzan golpes bajos, nosotros nos mantenemos a la altura”. En su apelación, ante todas las injurias de Trump, que los persiguieron durante años: “Su visión limitada y estrecha del mundo lo ha hecho sentirse amenazado por la existencia de dos personas trabajadoras, con un alto nivel educativo y exitosas, que casualmente son negras. Quiero saber: ¿quién le va a decir que el trabajo que está buscando actualmente podría ser uno de esos trabajos para negros?”.

“Es la misma estafa de siempre. La misma estafa de siempre. Repetir mentiras feas, misóginas y racistas en lugar de ideas y soluciones reales que realmente mejorarán la vida de las personas”, señaló.

“Porque recortar nuestra atención médica…, demonizar a nuestros hijos por ser quienes son y amar a quien aman, no mejora la vida de nadie. En cambio, nos hace más pequeños. Y déjenme decirles esto: reducir el tamaño nunca es la respuesta. Reducir el tamaño es lo opuesto a lo que les enseñamos a nuestros hijos. Reducir el tamaño es mezquino. Es insalubre. Y, francamente, no es presidencial”, argumentó.

Michelle, aunque se reconoció y celebró el entusiasmo que ha levantado la fórmula demócrata, advirtió que será una batalla difícil de conquistar. “Kamala y Tim han vivido vidas maravillosas y confío en que liderarán con compasión, inclusión y gracia, pero siguen siendo humanos. No son perfectos y, como todos nosotros, cometerán errores. Pero, por suerte, no es solo culpa de ellos. Depende de nosotros, de todos nosotros, ser la solución que buscamos. Depende de todos nosotros ser el antídoto contra la oscuridad y la división. No me importa cómo se identifiquen políticamente, si son demócratas, republicanos, independientes o ninguno de los anteriores. Este es nuestro momento de defender lo que sabemos en nuestro corazón que es correcto”.

No solo debemos defender nuestras libertades básicas, sino también la decencia y la humanidad. El respeto, la dignidad y la empatía básicos. Los valores que son la base misma de esta democracia”.

“En 77 días tenemos el poder de alejar a nuestro país del miedo, la división y la pequeñez del pasado. Tenemos el poder de unir nuestra esperanza con nuestra acción. Tenemos el poder de devolver el amor, el sudor y el sacrificio de nuestros padres y madres y de todos los que nos precedieron. Lo hicimos antes que ustedes y seguro que podemos hacerlo de nuevo. Trabajemos como si nuestras vidas dependieran de ello y sigamos haciendo avanzar a nuestro país y lleguemos más alto, sí, siempre más alto de lo que hemos llegado antes, mientras elegimos al próximo presidente y vicepresidente de Estados Unidos, Kamala Harris y Tim Walz. Gracias a todos, que Dios los bendiga”, señaló Michelle.

Al concluir, presentó a su esposo. “Por favor, den la bienvenida al 44.º presidente de Estados Unidos y al amor de mi vida, Barack Obama”.

“Me siento esperanzado porque esta convención siempre ha sido muy buena para los chicos con nombres raros que creen en un país donde todo es posible”, comenzó su intervención el expresidente, quien se enfocó casi de inmediato a honrar a Biden. “Sin lugar a duda que mi primera gran decisión como su candidato resultó ser una de las mejores: pedirle a Joe Biden que sirviera a mi lado como vicepresidente”.

“Joe y yo venimos de orígenes diferentes, pero nos convertimos en hermanos. Y mientras trabajamos juntos durante ocho años, a veces bastante duros, lo que más llegué a admirar de Joe no era solo su inteligencia y su experiencia, sino su empatía, su decencia y su resiliencia ganada con esfuerzo, su inquebrantable convicción de que todos en este país merecen una oportunidad justa”, expresó Obama. “Y durante los últimos cuatro años, esos son los valores que Estados Unidos más ha necesitado”.

Después de hacer un recuento de sus logros, aseguró: “La historia recordará a Joe Biden como un presidente excepcional que defendió la democracia en un momento de gran peligro. Me enorgullece llamarlo mi presidente, pero me enorgullece aún más llamarlo mi amigo”.

Después arremetió contra Trump, concluyendo que: “No necesitamos cuatro años más de fanfarronería, torpeza y caos. Hemos visto esa película y todos sabemos que la secuela suele ser peor”.

Sobre los motivos para estar convencido del potencial éxito de una presidencia de Harris, luego de hacer un recuento sobre su trayectoria recordó:“Después de la crisis de las hipotecas, me presionó a mí y a mi administración para asegurar que los propietarios de viviendas recibieran un acuerdo justo. No importaba que yo fuera demócrata. No importaba que ella hubiera tocado puertas para mi campaña en Iowa: ella iba a luchar para obtener la mayor ayuda posible para las familias que la merecían”.

Y agregó: “Juntos, Kamala y Tim han mantenido la fe en la historia central de Estados Unidos, una historia que dice que todos somos creados iguales, que todos merecen una oportunidad y que, incluso cuando no estemos de acuerdo unos con otros, podemos encontrar una manera de vivir juntos… No será fácil. El otro bando sabe que es más fácil jugar con los miedos y la imprudencia de la gente. Te dirán que el gobierno es corrupto, que el sacrificio y la generosidad son para tontos y que, como el juego está amañado, está bien tomar lo que uno quiere y cuidar de los propios intereses”.

“Ese es el camino fácil. Tenemos una tarea diferente: convencer a la gente de que la democracia puede dar resultados. Y no podemos limitarnos a señalar lo que ya hemos logrado”, dijo Obama. “No podemos limitarnos a depender de las ideas del pasado. Necesitamos trazar un nuevo camino para afrontar los desafíos de hoy”. Hizo también un recuento de las necesidades que apremian, y aseguró que Harris y Walz son los líderes indicados para resolverlos.

“Donald Trump y sus donantes adinerados no ven el mundo de esa manera. Para ellos, las ganancias de un grupo son necesariamente las pérdidas de otro. Para ellos, la libertad significa que los poderosos pueden hacer prácticamente lo que les plazca, ya sea despedir a trabajadores que intentan organizar un sindicato, envenenar nuestros ríos o evitar pagar impuestos como todo el mundo tiene que hacer”.

Obama también reconoció los retos internos. “Para avanzar en las cosas que nos importan, las cosas que realmente afectan la vida de las personas, debemos recordar que todos tenemos nuestros puntos ciegos, contradicciones y prejuicios; y que si queremos convencer a quienes aún no están listos para apoyar a nuestro candidato, debemos escuchar sus preocupaciones y tal vez aprender algo en el proceso”.

“Después de todo, si un padre o un abuelo dice algo que nos hace sentir incómodos, no asumimos automáticamente que sean malas personas. Reconocemos que el mundo avanza rápidamente y que necesitan tiempo y tal vez un poco de aliento para ponerse al día. Nuestros conciudadanos merecen la misma gracia que esperamos que nos brinden”, añadió.

“Así es como podemos construir una verdadera mayoría demócrata. Y, por cierto, eso no solo le importa a la gente de este país. El resto del mundo está pendiente de ver si realmente podemos lograrlo”, señaló el expresidente.

Concluyó lo que considera algo que une a todos los estadounidenses: “Creo que lo que todos anhelamos es un regreso a una América en la que trabajemos juntos y nos cuidemos unos a otros. Una restauración de lo que Lincoln llamó, en vísperas de la guerra civil, ‘nuestros lazos de afecto’, que aproveche lo que él llamó ‘los mejores ángeles de nuestra naturaleza’. De eso se trata esta elección… Si nos mantenemos firmes en nuestras convicciones, elegiremos a Kamala Harris como la próxima presidenta y a Tim Walz como el próximo vicepresidente de Estados Unidos. Elegiremos a líderes en todas las urnas que lucharán por la América esperanzada y con visión de futuro en la que todos creemos. Y juntos, también nosotros construiremos un país que sea más seguro y justo, más igualitario y libre”.

LA MIGRACIÓN, DESAFÍO Y OPORTUNIDAD

La migración fue un tema central el miércoles, cuando la noche cerró con un conmovedor discurso del coach Walz.

La crisis en la frontera y el aparente aumento de la criminalidad por parte de nuevos indocumentados son uno de los problemas que ven como prioritarios tanto demócratas como republicanos. 

La campaña demócrata ha resaltado el fracaso de una ley del Senado, nacido de una negociación bipartidista promovida durante el mandato de Joe Biden y que, entre otras medidas, como la de una gran inversión para asegurar la frontera, incluían mayores restricciones permanentes al sistema de asilo, algo que el presidente comenzó a aplicar recientemente por la vía ejecutiva, ya que Trump la obstaculizó con sus aliados MAGA en el Congreso, para beneficio de su tema retórico antiinmigrante en su campaña.

Harris ya prometió que de ser elegida presidenta intentará revivir esta propuesta legislativa y conseguir el apoyo suficiente para que sea rectificado por el Congreso.

Carlos Eduardo Espina fue uno de los oradores que hablaron sobre migración desde un enfoque positivo, como muchos sobresalientes beneficiarios de DACA.

“Dar la bienvenida a los inmigrantes no es un valor demócrata o un valor republicano, es un valor estadounidense”, dijo el joven influencer. “Ser proinmigrante es ser pro-América y Kamala Harris entiende esto y es por eso que una vez electa, ella rechazará el odio y encontrará soluciones que fortalezcan a nuestra nación, así que hagamos que la elijan”.

ESE ES MI PAPÁ

Tim Walz, aceptó la nominación de su partido a la vicepresidencia y aprovechó su discurso para dar las gracias al abarrotado estadio por «traer la alegría» a unas elecciones transformadas por la designación Kamala.

“Todos estamos aquí esta noche por una hermosa y simple razón: Amamos este país”, dijo Walz ante miles de delegados que llevaban pancartas en las que se leía “Coach Walz”.

Walz era poco conocido en el escenario nacional, pero sus paisanos y quienes lo conocen han venido diciendo que están felices que el resto del país sepa quién es Tim Walz. El discurso fue una oportunidad para presentarse y seguir entusiasmado a sus cada vez más admiradores.

Se apoyó en su experiencia como entrenador y como maestro durante 20 años. Walz fue miembro de la Guardia Nacional por 24 años, representante en el Congreso por 12 y estaba al frente de su estado Minnesota en su segunda administración como gobernador.

“No he dado muchos discursos como este, pero sí muchas charlas motivacionales”, dijo Walz a la multitud.

Tim describió su infancia en Nebraska, compartió sus problemas para concebir a su hija Hope, quien hizo un corazón con las manos y se lo puso sobre el pecho, mientras su hijo Gus, (neurodivergente) lloró copiosamente durante el discurso desde primera fila, donde exclamaba entre lágrimas: “Ese es mi padre”.

Walz también dejó espacio para la crítica a la fórmula republicana y a las políticas del partido: “Mientras otros estados prohibían los libros en sus escuelas, nosotros desterrábamos el hambre de las nuestras”.

LA DELEGACIÓN DE PENSILVANIA

El gobernador Josh Shapiro, como líder carismático y eficaz, lo que le ha permitido ganar en condados rurales y conservadores, fue uno de los destacados personajes entrevistados por numerosos medios de información antes y después de su sobresaliente discurso frente a la CND, en el que se refirió a lo que significa “la verdadera libertad”.

Quien fuera uno de los favoritos para ocupar el puesto de candidato a la vicepresidencia, fue reiterativo en su propósito para las próximas semanas: “Voy a hacer todo lo que esté en mi poder político para asegurar que Kamala Harris y Tim Walz ganen esta elección. La carrera está efectivamente empatada ahora mismo. Pensilvania es difícil, pero se puede hacer”, afirmó.

La alcaldesa de Filadelfia, Cherelle L. Parker, convirtió un desayuno de la delegación de Pensilvania en un mitin de motivación.

La participación, dijo Parker, es la clave. “Pensilvania sabe lo que es ganar una elección reñida. Hemos estado aquí antes. No vamos a perder esta. Sabemos lo que es cumplir bajo una presión inmensa”.

Por su parte el representante estatal Malcolm Kenyatta quien se presentó ante toda la asamblea reunida en el auditorio, compartió: “Crecí en una familia trabajadora pobre en el norte de Filadelfia: papá, trabajador social, mamá, asistente de salud a domicilio; los perdí a ambos cuando tenía 27 años porque no tenían acceso al tipo de atención médica que todos merecen. Ya saben, me beneficié de todos los diferentes programas gubernamentales que han ayudado a las personas. Tenemos que reconocer que, en la política pública el Proyecto 2025 no es un tema de conversación, no es una táctica de miedo. Este es un plan para hacer que la vida sea un infierno para los trabajadores y las familias trabajadoras”.

Durante los cuatro días de la CND testimonios desde la izquierda, de figuras centristas, e incluso de algunos republicanos para impulsar la campaña demócrata, se hicieron escuchar.

El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, habla con la prensa durante la Convención Nacional Demócrata este lunes en Chicago (Estados Unidos). (Foto: EFE/Octavio Guzmán)

REPUBLICANOS SE UNEN AL APELO 

«Deshazte de Trump», dijo ante la CND el ex vicegobernador republicano de Georgia, Geoff Duncan, que también es republicano. Dijo que quería llegar a los republicanos e independientes que estaban cansados ​​de «poner excusas para Trump».

«Si los republicanos somos intelectualmente honestos con nosotros mismos, nuestro partido no es civilizado ni conservador. Es caótico y loco. Y lo único que queda por hacer es deshacernos de Trump. Hacer lo correcto nunca será lo incorrecto», señaló.

El republicano recordó que por haber criticado abiertamente a Trump por afirmar falsamente que las elecciones habían sido robadas, «en el 2020, durante el peor momento, teníamos oficiales armados afuera de nuestra casa protegiéndonos de otros republicanos por los ataques de Trump».

«A mis compañeros republicanos en casa que quieren volver a la política, la empatía y el tono: saben qué es lo correcto que deben hacer. Ahora tengamos el coraje de ir y hacerlo en noviembre», expresó.

Duncan se unió a las decenas de voces republicanas, entre ellas de personas que trabajaron en la Administración Trump y que han venido endosando al ticket Harris-Walz. Dijo que, aunque no comparte todas las posiciones políticas de Kamala Harris, planea votar por ella.

“Si votas por Kamala Harris en 2024, no eres demócrata… eres un patriota”, aseveró.

“Soy republicano, pero esta noche estoy aquí como estadounidense, un estadounidense que se preocupa más por el futuro de este país que por el futuro de Donald Trump”, dijo Duncan, quien era vicegobernador del estado cuando Trump supuestamente intentó revocar los resultados de las elecciones de 2020 en Georgia.

EVOCACÍON A LA FE

“Un voto es una especie de oración por el mundo que deseamos para nosotros y para nuestros hijos… Y nuestras oraciones son más fuertes cuando rezamos juntos”, dijo el senador por Georgia Raphael Warnock. Él fue uno de los muchos oradores de la CND que en diferentes escenarios hablaron de su fe, principalmente cristiana, evocando varios versículos de la Biblia.

Al cierre de esta edición, la vicepresidenta Harris no había aún hecho su aparición estelar del jueves por la noche, un día dedicado a presentar partes personales de su vida, pero el martes dijo en declaraciones que se transmitieron en la sede de la CND, desde su acto de campaña en Wisconsin: “Juntos trazaremos un nuevo camino hacia adelante” y “Un futuro para la libertad, la oportunidad, de optimismo y fe”.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí