Washington.- Legisladores y activistas, temerosos por lo que una segunda presidencia de Donald Trump pueda significar para los indocumentados, instaron este miércoles al presidente Joe Biden a decretar medidas ejecutivas que protejan a millones de inmigrantes sin estatus, especialmente aquellos que han vivido y aportado a la economía por largo tiempo.
«La amenaza es real», afirmó el senador Cory Booker, demócrata de Nueva Jersey en una conferencia de prensa en el predio del Capitolio. «Trump ha hablado acerca de la deportación de miles y miles de personas que han estado, en su mayoría, aquí por la mayor parte de sus vidas».
El senador Alex Padilla, demócrata de California, urgió a Biden a que «tome acción ejecutiva para proteger a los inmigrantes indocumentados que llevan años esperando una reforma migratoria en este país».
«A pesar de todo lo que los inmigrantes aportan a nuestra economía hemos visto propuestas migratorias en los últimos meses que han dejado atrás a estas comunidades», añadió.
Padilla, Booker, junto con la senadora Catherine Cortez Masto, demócrata de Nevada; el senador Ben Luján, demócrata de Nuevo México, y miembros de la cámara de Representantes, insistieron en que el presidente Biden tiene atribuciones para decretar medidas que amparen a los indocumentados y los extranjeros con diversos tipos de visas temporales.
«Por lo menos un permiso de trabajo sería una bendición para mi. Llevo más de 20 años aquí aportando y esperando un alivio migratorio pero nada. Yo creo que nos merecemos que al menos nos protejan de la deportación a los que no tenemos delitos», dijo a EFE la guatemalteca Alicia Marroquín.
Biden dispuesto a escuchar
Janet Murguía, presidenta de la organización UnidosUS, quien se reunió con el mandatario el miércoles pasado, dijo que «el presidente está dispuesto a tomar acción y pidió propuestas más específicas y vamos a dárselas».
«El presidente tiene hoy, bajo la ley actual, de ofrecer a algunas personas indocumentadas un camino hacia el estatus legal», añadió Murguía. «Permisos de trabajo y estar libres de deportación. Le pedimos al presidente que use su poder para dar alivio a estas familias».
Por su parte Gustavo Torres, el director ejecutivo de la organización CASA, instó al presidente a que «use su poder para actuar», como lo hizo el expresidente Barack Obama (2009-2017) cuando emitió la Acción Diferida Para los Llegados en la Infancia (DACA)
«Que use su poder para proveer de estatus de protección temporal y deportaciones diferidas para residentes que han estado aquí por largo tiempo, personas que han estado aquí por más de 10 años», agregó Torres.
Por su parte, el senador Luján dijo que muchas de las personas a las que se refieren estos reclamos «han vivido en el país por años y años, han criado familias, han estudiado en las universidades y escuelas de oficios, han contribuido a nuestra economía».
«Nuestro sistema de inmigración está desbaratado», agregó Luján. «Necesitamos hacer algo para reparar este sistema pero algunos colegas republicanos extremistas están más interesados en ganar puntos políticos que en reparar un sistema desbaratado».
La petición de los legisladores y activistas se une a una solicitud enviada el mes pasado por un grupo de congresistas demócratas que pedían permiso de trabajos para los inmigrantes de larga data.
Otorgar permisos de trabajo a inmigrantes que han vivido en el país por largo tiempo podría aumentar los ingresos fiscales anuales en aproximadamente 13.800 millones de dólares.
Proponen establecer tres nuevos programas que otorgarían permisos de trabajo para cónyuges indocumentados de ciudadanos estadounidenses, para inmigrantes que llegaron siendo niños pero no fueron elegibles para el programa de DACA y para trabajadores que han pagado impuestos durante años.