Esta será históricamente una de las elecciones intermedias más importantes. Y todos tenemos la oportunidad de alzar nuestras voces votando y haciendo que otros voten.
En esta elección, tienes a un expresidente presionando a los candidatos que todavía quieren anular las elecciones presidenciales de 2020. Hay muchos de estos candidatos que, de ser elegidos, estarían dispuestos a anular el voto popular en sus estados.
Nuevamente, un partido está utilizando la raza, el crimen, la inflación y la inmigración como una forma de incitar el miedo en su base y en algunos no afiliados. En lo que guardan silencio es sobre el aborto debido a la decisión de la Corte Suprema que causó tal tormenta e inspiró a tantas mujeres a registrarse y votar.
Muchos de nosotros seguimos todas las encuestas. Si bien hace años, solo había un par de empresas de encuestas, ahora vemos muchos encuestadores, cada uno de los cuales afirma tener los datos más recientes. La mayoría de las veces son cualquier cosa menos que precisas. Si estas empresas de encuestas hubieran encuestado previamente la pelea entre Cassius Clay (más tarde Muhammed Ali) y Sonny Liston, el oso de Denver recién salido de prisión, las encuestas hubieran dado un 99% a que Liston le daría una paliza a Clay. Pero para sorpresa de muchos, Clay ganó con una pequeña predicción de quienes le dábamos nuestro apoyo.
En el mercado actual, no hay solo tres grandes empresas de televisión como ocurría hace tantos años, y un número limitado de periódicos importantes. Ahora tienes muchas organizaciones de noticias que tienen programación las 24 horas. Aunque tenemos menos periódicos, están las redes sociales siempre activas.
Luego entra todo el dinero oscuro en esta elección y son más de mil millones. No, esto no es dinero de personas racializadas, es dinero de los súper ricos, en su mayoría de derecha, que no tienen que decirle al público quiénes son. Y estos miles de millones de dólares pueden influir en muchos votantes poco informados, sin importar cuánta verificación de hechos haya disponible.
Hay algunos grupos de votantes que no parecen ser contactados por las empresas de encuestas. Estos incluyen personas negras, morenas, mujeres, jóvenes, de la comunidad LGBTQ y personas que estuvieron encarceladas. Cabe señalar que muchos estados, en particular, Georgia, Texas, Florida y otros, han dificultado el acceso al voto.
Pero hay quienes ya están votando anticipadamente, más que en otras elecciones intermedias. Y parte de esto es impulsado por los candidatos, por las regulaciones más estrictas para el voto por correo, menos buzones de entrega y la limitación de los días y horas para votar.
Hoy tenemos candidatos que se mudaron a un estado solo para postularse, tenemos candidatos que estuvieron en el capitolio el 6 de enero y un candidato acusado de violencia y de pagar dos abortos mientras era apoyado por los evangélicos. No obstante, debemos examinar a todos los candidatos, sus calificaciones y plataformas.
Siempre debemos estar listos para criticar cualquier programa de la Administración, pero luego, al mismo tiempo, la oposición debe decir cuáles son sus planes y cuál es la diferencia.
Tengo mi ideología personal, pero paso gran parte de mi tiempo año tras año participando con organizaciones sin fines de lucro que registran a todos, en un esfuerzo no partidista. Aprecio nuestra democracia y deseo que la mayoría de los votantes elegibles estén registrados y votando.
Hoy vivo en Georgia en el condado de DeKalb, donde está registrada la gran mayoría de todos los votantes elegibles. Ahora el fin, es sacarlos a todos a votar.
Registrar votantes es un trabajo serio, pero luego debemos trabajar aún más para que todos vayan a las urnas y así salvar nuestro sistema electoral. Y si la participación es fuerte damos un buen paso adelante para proteger nuestra democracia.
