La decisión adoptada la semana pasada por el banco central de Estados Unidos, conocido como la Reserva Federal, de no cambiar la tasa de interés de los fondos federales no causó agitación en los mercados financieros. En contra de lo esperado, hasta el anuncio de que, durante el resto de este año, puede haber sólo una rebaja en la tasa de interés no alteró el ascenso sostenido en la bolsa de valores y contribuyó a una corrida alcista en los precios de los bonos.
Ayudó que, en la mañana del último día de la reunión del banco central, se anunció que el índice de precios al consumidor no cambió en mayo, lo cual interrumpió la tendencia creciente de la inflación del primer trimestre de este año. También, al siguiente día, el Departamento de Trabajo anunció que el índice de precios de los productores disminuyó 0.2 por ciento en mayo, desde abril, otra indicación de inflación decreciente.
Sin embargo, Jeff Sommer dijo en el New York Times (06|16|24), lo que explica la indiferencia de los mercados es porque han estado subiendo “sobre las espaldas de gigantes.” Es la revolución tecnológica derivada de la inteligencia artificial la que ha impulsado el valor en el mercado de un puñado de empresas, tales como Nvidia, Meta y Alphabet. Además, una corrida alcista en los precios de los bonos ha empujado hacia abajo el rendimiento de los bonos del Tesoro a diez años, lo cual es positivo para las hipotecas y la vivienda.
*Analista y consultor internacional, ex-director de la Oficina de la CEPAL en Washington. Comentarista de economía y finanzas de CNN en Español TV y radio, UNIVISION, TELEMUNDO y otros medios.