Garnet Valley, PA – El jueves 22 de octubre el Departamento de Programas Nacionales de Esperanza presentó la “Cumbre de Ciencia y Fe: Transformando Nuestra Comunidad, Uniendo la Fe y la Ciencia y Sirviendo a Dios”.
La cumbre es parte del proyecto Ciencia, Fe y Esperanza, que comenzó a principios de este año. El Rev. Edgardo Rosado, Ph. D. Director Asociado de Proyectos en el Departamento de Programas Nacionales de Esperanza explica que “El proyecto de Ciencia, Fe y Esperanza es de vital importancia para nosotros en Esperanza, porque provee un lugar seguro para el diálogo profundo en torno a la confluencia del tema de la fe y la ciencia para nuestros pastores, congregaciones y jóvenes.” Como parte del proyecto se difundió una encuesta a los pastores y otros líderes de las congregaciones para conocer las actitudes con respecto a la relación entre la ciencia y la fe. También se desarrolló una serie de ocho podcasts (esperanza.us/ciencia-y-fe) donde se discute el tema desde el punto de vista de pastores, científicos y estudiantes de escuela superior y universitarios.
La Dra. Dawn Shell, directora de la Escuela de Medicina Osteopática de la Universidad de Rowan, profesora y microbióloga comenzó la presentación con el relato del libro Levítico, donde Dios le da instrucciones detalladas a Moisés de cómo los sacerdotes debían identificar y aislar a los pacientes de lepra. Dios asigna a los sacerdotes a cuidar de los enfermos. La historia apunta a la ciencia de la epidemiología. La Dra. Shell mencionó que Dios tiene el poder de curar inmediatamente pero también puede nombrar a otros y darles los talentos para tener parte en el proceso de sanación. Ella habló de COVID-19 y la importancia de la ciencia en el proceso de controlar la pandemia. Es importante que como personas de fe nos acerquemos a Dios y confiemos en Él, pero también tenemos que escuchar los datos que la ciencia va proveyendo según se aprende más de esta enfermedad. La ciencia y la fe están en un balance y concluye que “como la iglesia de Cristo debemos de apoyarnos en Dios y no en nuestra propia prudencia”.
El Dr. Richard Mouw, Presidente Emérito y profesor del Seminario Teológico Fuller observó que la pandemia le brinda a la iglesia una experiencia de aprendizaje. “Dios quiere que aprendamos cosas nuevas, si se lo permitimos”. Opinó que el COVID-19 ha causado más conflictos entre la fe y la ciencia pero que las iglesias locales deben servir como escuelas de comportamiento virtuoso. “Siempre debemos de estar listos para defender nuestras creencias, pero debemos de hacerlo con respeto y gentileza”.
El Rev. Dr. Michael Barry, Director Emérito de Cuidado Pastoral en “Cancer Treatment Centers of America” y profesor en Luther College y su colega, Dr. Loren Toussaint discutieron sobre la relación de la ciencia y la fe en el contexto del perdón. En el momento en que vivimos muchos individuos tienen dificultad, se sienten abrumados y les falta paciencia. Con todo el estrés es más fácil odiar y responder negativamente a los que están a nuestro alrededor.
El Dr. Toussaint dijo que “para muchos la parte más difícil es el encontrar la motivación para perdonar. Razones para hacerlo incluyen el bienestar emocional y físico o basado en los principios de nuestra fe”. El perdón es un ejemplo de cómo la teología y la psicología están relacionadas. Por su parte, el Dr. Barry comentó que en las escuelas de medicina no se les enseña a los estudiantes como hablar con sus pacientes acerca del perdón y la función que tiene en el proceso de sanación. Este componente de fe puede ayudar a muchos pacientes a tener mejores resultados. “Algunos oncólogos con los que he trabajado en CTCA observan que, en ocasiones, dos pacientes con diagnósticos y prognosis similares reciben el mismo tratamiento médico, pero tienen distintos resultados”. La fe y la actitud del paciente juegan un papel en el proceso de sanación. Él concluyó diciendo que “vivimos en un mundo violento, con el potencial para más violencia y necesitamos una voz en el desierto anunciando a un mundo de perdón de la misma forma que Desmond Tutu y Nelson Mandela lo hicieron”. Este es un llamado para todos nosotros. Durante estos tiempos de alta ansiedad, con elecciones presidenciales en unos días, con una pandemia que continúa su curso, está en nuestro poder el perdonar y tratar con amor a nuestro prójimo, aun cuando ellos no hagan lo mismo.
Dr. Rosado añadió que “en la Cumbre de Fe y Ciencia, uno de nuestros expertos subrayó el hecho de que la fe y la ciencia trabajan en conjunto, pero en direcciones diferentes como nuestro dedo pulgar y nuestro dedo índice, para ayudarnos a sostener y a entender la manera en que Dios se manifiesta a nosotros a través de su maravillosa creación. Estamos convencidos que esta oportunidad de exploración y de diálogo servirá como el fulcro para que nos mueva hacia una comprensión más amplia del tema y que estimule a nuestros jóvenes a aceptar la ciencia como su vocación y servicio a Dios.” Como científica y cristiana digo “amén”.